laliga 1,2,3· Almería-reus

Y ya son cinco partidos sin ganar (0-1)

  • El Almería empieza a asomarse al descenso al caer ante el Reus con un solitario gol de Borja Fernández

Tristeza en los jugadores del Almería tras el gol del Reus.

Tristeza en los jugadores del Almería tras el gol del Reus. / R. González

Un solitario gol de Borja Fernández ha dado este domingo los tres puntos al Reus en su visita al Estadio de los Juegos Mediterráneos frente a un Almería que acumula cinco jornadas sin ganar y que empieza a asomarse a la zona de descenso.

Almería y Reus se disputaron el control del esférico durante el primer tramo de partido, dando el equipo visitante mayor sensación de profundidad, pero el conjunto almeriense fue ganando terreno a medida que pasaban los minutos, frente a un Reus obligado a mover el banquillo muy pronto ante una lesión sufrida por Ricardo Vaz.

Un disparo de Nauzet Alemán que repelió Edgar Badia animó al Almería. Nano rozó el gol en una falta directa y un centro envenenado de Fran Rodríguez casi lo introduce Olmo en su propia portería, pero, sin embargo, lo que llegó fue el gol del Reus en una acción aislada. Tras una galopada de Álex Menéndez, Borja Fernández se encontró con un balón rechazado en la frontal del área, recortó a Owona y su disparo terminó alojado en el fondo de la meta de René.

Los rojiblancos, que vieron como dos remates de Juan Muñoz que acababan dentro de la portería rival eran invalidados, en ambas ocasiones por encontrarse el punta utrerano, que todavía no ha marcado en liga, por fuera de juego, se encontraron con que el Reus, lejos de entregar definitivamente la posesión, se hizo con el control de la misma en el arranque del segundo acto.

Con las bajas de Tino Costa, Morcillo, Caballero, Verza e Hicham por lesión y Fidel por sanción, Ramis tampoco encontró en el banquillo de quién tirar para tratar de revertir la situación del partido, intentándolo con la entrada de Pervis Estupiñán y Álex Corredera.

El Reus dio un paso atrás y el Almería se volcó en busca del empate, pero sin demasiadas ideas ni recursos para penetrar en una defensa de hasta seis jugadores del Reus, que certificaba así su triunfo.

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