Con un emotivo discurso en el que mezclaba recuerdos y sentimientos, el rector de la Universidad de Almería, Pedro Molina, recibió el sábado en el ayuntamiento de Albox el nombramiento como 'Hijo Predilecto' de la localidad. Acompañado en el salón de plenos por el alcalde, Rogelio Mena, y el portavoz del grupo socialista municipal, Matías García, la coral universitaria y más de un centenar de personas; Molina desgranaba en su discurso recuerdos de su infancia en Albox, donde nació en 1945.

"Al recibir la noticia de que el ayuntamiento de Albox había pensado hacerme Hijo Predilecto, me asombró cómo me afectó la noticia. De pronto, aparecieron todo un cúmulo de sensaciones, de vivencias guardadas en el fondo del cajón de la memoria en las que ni siquiera había reparado antes. Fue como si visualizara de nuevo toda la red afectiva y de lazos familiares que marcó mis primeros años, mi infancia", decía el rector de la UAL en las primeras líneas de su discurso. Molina señalaba al final que recibir ese nombramiento ha supuesto para él "el mejor regalo" de su vida, "la dádiva más hermosa de mi pueblo en el que pasé poco tiempo pero que ha marcado toda mi vida".

El Pleno municipal de Albox aprobó por unanimidad el pasado 4 de diciembre el nombramiento de Molina, junto con la concesión del escudo de oro del consistorio, que también recibió el sábado.

Pedro Molina vivió en Albox su primer ciclo de vida hasta que se trasladó a vivir a Almería. Su padre, Alfredo Molina, fue maestro de escuela y siempre estuvo también vinculado a Albox, donde dio clases varios años en el Llano de los Olleres.

La corporación argumentó el nombramiento en los méritos alcanzados por Molina, entre otros, que cuenta con un amplio currículum académico, profesional e investigador dentro de su campo de conocimiento.