Hay héroes de muchas formas, tipos y tamaños y algunos están en el propio entorno. La educación de los hijos puede redundar en los padres y los niños pueden ser los valedores de buenos hábitos que transfieran a sus progenitores. El programa educativo Héroes en casa se desarrollará a partir del mes de marzo en 17 colegios de la provincia con 3.700 escolares de entre 8 y 11 años, y la colaboración de 40 docentes. Esta iniciativa está organizada por la Fundación Freno al Ictus, que busca dar visibilidad a la enfermedad con el objetivo de trabajar por la prevención y la detección precoz.

El objetivo de este proyecto está concebido como un programa educativo, basado en informar y enseñar al colectivo de jóvenes qué es el ictus, factores de riesgo, cómo se puede prevenir, cuáles son las señales de aviso para su detección y cómo actuar.

El logotipo del proyecto.

Es un proyecto concebido para reducir el impacto del ictus en España gracias a la comunidad educativa. Quieren transformar la sociedad basándose en tres pilares fundamentales: Educar mediante la promoción de la salud desde los jóvenes; formar creando héroes en la comunidad; y multiplicar a través de la concienciación de los adultos a través de los hijos.

Las acciones que se desarrollarán para llevar a cabo este proyecto: Desarrollar acciones de comunicación a los chavales con charlas informativas/formativas; y reforzar la información por medio de la distribución de material didáctico y el uso de las redes sociales.

La delegada del Gobierno de la Junta de Andalucía, Maribel Sánchez Torregrosa, explicó que se celebra “gracias a la colaboración de más de 30 entidades almerienses públicas y privadas. Se demuestra que la colaboración, la suma de todos, crea proyectos que vienen a dar vida, con estos héroes en casa que van a ser formados en los colegios, para que pueden detectar los síntomas previos de un ictus y avisar a los servicios de emergencia”.

La delegada recordó que la Asociación Almeriense de Familiares y Personas con Daño Cerebral Sobrevenido (Brada) le puso en conocimiento de la iniciativa, que se convierte en un programa pionero que comienza en Almería.

La vicepresidenta de Diputación y diputada de Bienestar Social, Ángeles Martínez, mostró la importancia de los buenos hábitos: “Hoy día las enfermedades cardiovasculares tienen un alto impacto en nuestra vida pero quiero quedarme con un dato muy positivo y es que el 90% de los ictus se pueden prevenir”.

El delegado de Salud de la Junta de Andalucía, Juan de la Cruz Belmonte, apuntó que con este tipo de actuaciones se realizan gracias al apoyo de todos: “La unión hace la fuerza y así se pueden hacer proyectos tan bonitos, donde podemos salvar vidas o evitar ciertas incapacidades”.

Algunos de los protagonistas que participarán de algún modo en el proyecto.

El delegado de Educación, Igualdad, Políticas Sociales y Conciliación en Almería, Antonio Jiménez Rosales, apuntó que “los estudiantes serán el altavoz y servirán como beneficio para la vida de nuestros mayores. Serán 66 actividades formativas donde conocerán hábitos de vida saludable. Prevenir estar en el no tener que curar. También aprenderán cómo reconocer esta enfermedad que no se enseña en Matemáticas, Lengua o Inglés... pero se están preparando para el futuro”.

El presidente de la Fundación Freno al Ictus, Julio Agredano, destacó que esta iniciativa que “es pionera, se lanza a nivel nacional desde la provincia de Almería. Esta enfermedad nos afecta a todos y cada año afecta a 120.000 personas en España. Es la principal causa de discapacidad adquirida. El ictus representa la segunda causa de muerte, siendo la primera entre las mujeres”.

Agredano también incidió en que el tiempo de detección y la actuación es fundamental para evitar secuelas o mortalidad y que el eslabón débil son las personas, ya que los hospitales y emergencias están preparados, pero la población no suele saber cuáles son los síntomas del ictus y no actúa debidamente y de ahí la importancia de esta iniciativa.