Sus nombres son Ariadna García, alumna del Grado de Estudios Ingleses, y Álvaro Ramajo, del Grado de Ingeniería Electrónica Industrial. Con ellos nacieron, hace ahora cuatro años, las Becas de Excelencia de la Universidad de Almería, recibiéndolas tras su primera matrícula en este campus y habiendo sido capaces, ambos, de mantenerlas durante el recorrido de sus estudios, curso tras curso. “Aquí hay prestigio, hay nivel, y destaco el trato humano, que es estupendo; de los profesores no puedo tener ninguna queja, con un alto grado de implicación, lo que es una idea que no tenía antes de la universidad porque pensaba que iba a ser más distante, pero no, se sabe motivar al alumno”. Así lo relató Ariadna, secundada por Álvaro: “Se debe tener absoluta confianza en ponerse en sus manos porque tienen una gran experiencia, lo hacen muy bien; yo estoy muy contento con lo que me ha dado la Universidad de Almería”.
Ellos dos como referentes, y todos los demás becados por tercera, segunda o primera vez hasta un total de 16 premiados, fueron los grandes protagonistas de un acto de entrega emotivo y cargado de orgullo tanto de familiares como de los centros de Secundaria de los que proceden los recién matriculados en una UAL que los arropa desde el primer momento y que los llevará de la mano en una formación integral: “Os pido una visión más amplia y comunitaria de la universidad, que seáis estudiantes ejemplares con notas excelentes, pero también estudiantes comprometidos”. Ese fue uno de los mensajes que les lanzó Maribel Ramírez, vicerrectora de Estudiantes, Igualdad e Inclusión, reconociendo que “dos de los principales objetivos son atraer talento y retener talento, y por ello se reconoce el trabajo de los estudiantes que han destacado, pero también premia su lealtad a la Universidad de Almería”.
La convocatoria reconoce el esfuerzo previo, pero también la constancia, ya que los becados deben entender “este premio no tan solo como el fin de una etapa culminada con éxito, sino como el comienzo de un nuevo reto”. Dadas sus notas, pudieron “elegir un grado afín a sus preferencias, algo que les gusta de verdad”, yendo la vicerrectora más allá: “Sabemos que sois el futuro de nuestra sociedad y todos debemos contribuir para que adquiráis las máximas competencias y que seáis capaces de enfrentaros a todo”.
En cuanto a la delegada de Educación, María del Carmen Castillo, mostrando orgullo del trabajo previo realizado en los centros de Secundaria, “con personas que han hecho que estos alumnos alcancen esas cotas de excelencia”, ha reconocido en los protagonistas valores como “constancia, superación, motivación, esfuerzo…”. Castillo insistió en la idea de que “entre todos, centros educativos y universidad, se consiga hacer ciudadanos con espíritu crítico, que den esperanza de que el futuro está ahí”.
Comentar
0 Comentarios
Más comentarios