La serie española Casa de papel está teniendo mucha repercusión en España y fuera de nuestras fronteras, y no es para menos. El inicio de la serie está rodeado de mucha acción y adrenalina y eso ha llegado al gran público.

En Murcia han decidido no quedarse atrás y hacer una adaptación como ellos saben, dándoles un toque de humor al asunto. Hace unos meses Juan Alcaraz y unos amigos se lanzaron a hacer el cortometraje más divertido del verano.

Hablaron con varias personas entre ellos con Eduardo Manzanares, un almeriense de Serón al que le encanta participar en rodajes de pequeñas películas y cortometrajes y es que el éxito de la serie, que recientemente ha sido la tercera entrega hizo que se pudiera realizar este cortometraje y así aprovechar el tirón.

Eduardo Manzanares, uno de los actores del cortometraje, siente mucho aprecio por su pueblo, Serón y ha aprovechado su tiempo de estudio entre oposiciones y trabajos para sacar tiempo para la afición que más le gusta: actuar.

El ambiente del grupo que se ha conformado en el rodaje han hecho que el joven almeriense demuestre su potencial junto al resto. Él tiene entre sus ídolos a Carlos Bardem y aunque está opositando para policía para labrarse un futuro, también le gustaría experimentar en esta profesión y poder actuar en películas y en lo que le ofrezcan, ya que ha participado en más cortometrajes aunque éste ha sido el más cañero.

En la grabación del corto a Edu se le asigna un pueblo de Murcia pero en realidad el que quería ser de otro, Puente Tocinos, uno de las poblaciones con nombre muy recurrente. Entre el plantel se encuentra una de las personas que más ha disfrutado de la acción y la diversión que es Queta Díaz, una joven profesional de la comunicación que ha hecho varios obras de este estilo.

En el cortometraje también destaca los fichajes de dos estrellas murcianas muy conocidas para esta grabación como el dibujante ‘mastodonte’ Salva Espín y el humorista Jaime Caravaca, que le han dado ese toque ameno al cortometraje. Juan Alcaraz, el director, afirma que le encantaría volver a vivir esta experiencia pero que el sacrificio que cuesta sacar este tipo de producciones, el tiempo y el dinero, hacen que sea difícil pero lo intentará.