Almería

Cae un grupo que usaba motos de agua para introducir inmigrantes

  • Asentandos en la provincia almeriense, se dedicaban también al tráfico de sustancias estupefacientes

Parte del estupefaciente intervenido a los miembros de la organización.

Parte del estupefaciente intervenido a los miembros de la organización. / Cnp-GC

La Policía Nacional y la Guardia Civil, con el apoyo de Europol, han desarticulado una red de origen marroquí dedicada a introducir en España drogas e inmigrantes, que, entre otros métodos, llevaban a las costas españolas en potentes motos de agua con las que cruzaban el Estrecho de Gibraltar.

En una nota de prensa, el Ministerio del Interior informa de que en la operación han sido detenidos 19 miembros de esta red, que cobraba 4.000 euros por el trayecto a cada inmigrante y 500 más si éste quería un primer alojamiento en España.

En la operación se han realizado siete registros en diversas localidades de la provincia de Almería, en los que han sido intervenidos 11,6 kilogramos de distintos tipos de estupefacientes, 15.460 euros en efectivo, equipos informáticos, teléfonos, tabletas y soportes físicos de memoria externa, además de dos vehículos y diversa documentación relacionada con las actividades de la banda.

La red usaban distintos medios para introducir en España ilegalmente a personas, mayoritariamente de origen magrebí.

Uno de los métodos que más utilizaba era acercarlos en potentes motos de agua con las que cruzaban el Estrecho de Gibraltar en pocos minutos.

También usaban pequeñas embarcaciones tipo patera o hinchables, que fletaban desde pesqueros o embarcaciones semirrígidas que salían de las costas cercanas a Tánger (Marruecos) y simulan faenar o practicar navegación de recreo.

Estas embarcaciones se acercaban hasta el límite de las aguas territoriales españolas y abandonaban allí a los inmigrantes a su suerte, en las pateras o embarcaciones neumáticas con las que seguían la navegación hacia las costas españolas.

La red ofrecía a los inmigrantes, por otras tarifas, la posibilidad de que cuando alcanzaran la costa contactaran con determinados números de teléfono móvil, con los que se ponían en contacto con otras personas de la red que les recogían y trasladaban a otros puntos de la geografía nacional, generalmente en la provincia de Almería.

En otras ocasiones la organización ofrecía a los inmigrantes documentación de otras personas, con características físicas similares a las suyas, de tal forma que podían sortear de esta forma el paso del control fronterizo.

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