Vega de Almería,

hueles a romero

de la serranía.

Tiempo de paz y olvido,

si es posible

olvidar lo que ha sido

Resumode la trilogía dedicada a la calle san Ildefonso. Tras perder su valor estratégico como defensa de la Alcazaba y vecindario del Puerto y Almedina, el baluarte (reducto) que le dio nombre desapareció mediado el s.XIX. Su perímetro yermo se transformo paulatinamente en el populoso barrio que hoy conocemos. Nucleado alrededor del inicial proyecto del arquitecto Joaquín Cabrera de 16 manzanas, creció con nuevas calles y patios de tradicionales casas almerienses de puerta, ventana y "terrao" alineándolas en la altura de un piso. A modo de revival urbanístico, el plano de Pérez de Rozas (1864) ya recoge las del Encuentro, Medalla, Tesoro, Duda y Amparo. El vacío de tres décadas (1858 a 1892) en los padrones censales depositados en el Archivo Municipal "Adela Alcocer" (AMAL), fuente indispensable al investigador, nos impide hacer un metódico seguimiento vecinal. En el primero en que se contempla la calle (1892) se reseñan 22 casas propiedad o en alquiler de jornaleros, marinos (no se especifica si pescadores o embarcados en buques comerciales) y carpinteros (tampoco sabemos si son de "ribera)". Casi todos estos cabeza de familia proceden de Adra y Roquetas, entre ellos distintos parientes del escritor y docente emigrado a Argentina, Fermín Estrella, domiciliado en Plaza de Pavía y vecino de Gaspar Vivar, autor del célebre Fandanguillo de Almería. En el nº 27 de san Ildefonso -concurrido viario que venía a desembocar en la mínima huerta ermitaña de san Antón- nació y vivió su mocedad nuestra biografiada María Pérez Enciso (1908-1949), aunque no su hermano Guillermo y su hija Rosa Olmo, a los que volveré más adelante.

Un pronunciado salto cronológico nos permite evocar al batallón de jóvenes costureras del barrio que acudían en los años sesenta al taller de Sastrería Molina Hermanos (Jerónimo y Rafael), próximo a Puerta de Purchena, y con especial cariño al "enseñante" D. Manuel, apodado irónicamente "Calvo Sotelo" (dada su acusada alopecia), aunque era la antítesis ideológica del líder derechista asesinado. Me contaba Alejandro Reyes -responsable del madrileño Club de Música "San Juan Evangelista"- que en la posguerra fue represaliado por el franquismo y expulsado del Cuerpo de Faristas. En el reducido recibidor de su casa abrió una escuela particular, bien nutrida de niños del entorno por cuya asistencia los padres aportaban unas mínimas pesetas, cuando podían pagarlas. Seguro que alguno de aquellos alumnos aún lo recuerda. Junto a Alejandro, al aula de D. Manuel, respetado y temido por los tiernos infantes ya que aplicaba la dolorosa y repudiable (antes y ahora) máxima de que "las letras con sangre entran", asistían los también amigos Simeón Aguilera, guitarrista; Mario Paris, cabal aficionado flamenco y cofundador de la peña Los Tempranos, y Juan del Águila, expresidente de la AA.VV. Casco Histórico.

HIJA Y HERMANO

DE MARÍA ENCISO

Instalada en Barcelona, María Pérez Enciso se casó con José del Olmo, al igual que ella periodista y juez durante la guerra. El matrimonio tuvo a Rosario como único descendiente ya que prontamente se divorciaron. Con el seudónimo de "María Enciso" o "Rosario del Olmo" ejerció de jefe de prensa del Partido Comunista y como máxima responsable de la Asociación Profesional de la Mujer en Cataluña. En enero de 1939 madre (e hija) huyeron a Francia antes de ser apresada y sometida a un sumario militar. De los campos de refugiados rescató a numerosos niños españoles que fueron entregados en adopción a familias de Bélgica antes de que la Alemania nazi invadiera ese pais. Atravesando Francia y el Canal logró embarcar finalmente en Liverpool hasta el puerto americano de Barranquilla. Tras peripecias varias en Colombia y Cuba, se asentó definitivamente en Méjico D.F., donde falleció a la temprana edad de 41 años víctima de una infausta operación de apendicitis. La niña quedó al cuidado de Mercedes Rull Alonso -amiga de la casa y almeriense como ella- y en su adolescencia bajo la tutela en Venezuela de su tío materno. Digamos para concluir la breve semblanza que María Enciso dejó escritos -amén de centenares de artículos periodísticos en Barcelona y América- cuatro libros en prosa y verso:

-Europa fugitiva:

Colombia, 1941. En el narra los horrores de la 1ª Guerra Mundial

-Cristal de las horas:

Bogotá, 1942. Con 125 composiciones líricas en las que repetidamente evoca a su Almería lejana

-De Mar a Mar:

México, 1946. Editada por Manuel Altolaguirre, también desterrado, también poeta de la Generación del 27

-Raíz al viento:

México, 1947. El prologuista, Nieto Caballero, nos traza su perfil psicológico y profesional: "María Enciso venía de un gran dolor. En España, su patria, caía la hora del espíritu y se entronizaba la de la materia…

Nacida en Barcelona 1937, por el programa "Mujer y Ciencia" (auspiciado por la Unesco) sabemos de Rosa Olmo Pérez adulta. Profesional de reconocido prestigio académico y gubernamental en el continente americano. Comprometida en la lucha contra la drogadicción y a favor de los derechos de la mujer andina., falleció en diciembre de 2001 y dejó un heredero:

Socióloga por la Universidad de Wisconsin, master en Criminología por la Universidad de Cambrigde y doctora en Ciencias Sociales por la Universidad Central de Venezuela. Ejerció su docencia en ésta Universidad Central, así como en universidades de Méjico, Puerto Rico y Estados Unidos. Fue directora de Ciencias Penales y Criminológicas de la Facultad de Ciencias Jurídicas y Políticas, autora de libros, conferenciante, etc. etc.

Su tío Guillermo no le va a la zaga en cuanto al magnífico currículo desarrollado en aquella nación. Tras concluir muy joven los estudios de Psiquiatría, logró escapar de España y fue internado en un campo de refugiados en Francia, del que su hermana logró rescatar y llevarlo con ella a América. En 1947 era profesor del Instituto Pedagógico Nacional de Venezuela; país en el que está considerado maestro y fundador de los Estudios de Psicología. Casado con la nativa Gisela Mozzarati, murió en Caracas en febrero de 2007, sin descendencia. Otro especialista español exilado escribía:

… En fin, Guillermo Pérez Enciso era un joven licenciado en 1939 por la Universidad de Barcelona, con una activa participación social y política en la vida universitaria…

Su sabiduría, capacidad docente y la condición de pionero en aquel por entonces baldío campo de las ciencias sociales y humanísticas, lo elevaron a la categoría de patriarca científico en Venezuela…

Al aire, la vela blanca,

lejos, la caliente arena,

una noche en alta mar

en un barquito de vela…

Plazuela de los Olmos,

honda melancolía,

y un dolor sin remedio

sobre las ramas tibias