El Consejo de Gobierno de la Junta de Andalucía ha acordado declarar Bien de Interés Cultural (BIC), con la categoría de zona arqueológica, el yacimiento prehistórico del Garcel en Antas (Almería), perteneciente a la Edad de Cobre y con restos anteriores del Neolítico Final.

La zona delimitada, de 14.700 metros cuadrados de extensión, se sitúa en un cerro que se eleva unos cincuenta metros sobre el cauce del río Antas, con una superficie muy irregular por la continua erosión fluvial.

El estudio de sus restos se inició a finales del siglo XIX a cargo de destacados arqueólogos de la época, como los hermanos Siret, aunque fueron las excavaciones realizadas en 1973 las que aportaron los datos más relevantes y descubrieron estructuras de habitación, producción y almacenamiento pertenecientes a un poblado del Cobre Antiguo.

Las intervenciones arqueológicas registraron cabañas con hogares circulares, silos y abundante escoria perteneciente a hornos de fundición de cobre. Al periodo Calcolítico corresponden los restos de cerámica, hallados junto con otros objetos de adorno, brazaletes y cuentas de concha y hueso. En cuanto a la industria lítica, se localizaron pequeñas piezas de sílex trapezoidales, triangulares y de media luna, además de raspadores y buriles.