El Zapillo Atlético se impuso en casa a La Cañada, un rival directo por escapar de la zona de peligro de la clasificación. El encuentro se puso muy de cara, en los primeros minutos, para los locales.

A pesar de que los cañaeros saltaron al césped del Rafael Andújar a por todas, desde el primer minuto, encajaron el primer tanto antes de cumplirse el diez de juego. La Cañada empezó atacando, con gran fluidez por ambas de sus bandas de ataque, donde quiso aprovechar la velocidad de sus extremos.

No sacó fruto de estas jugadas debido a la seguridad defensiva de un equipo local que inauguró el tanteador en el minuto 7. Isidro, tras robar el esférico en el centro del campo a un defensor rival, batió por alto, desde casi 40 metros al guardameta cañaero. Buyo, que se encontraba adelantado, no pudo hacer nada para atajar el disparo del jugador del Zapillo.

A partir de ese momento los locales empezaron a tomar el mando del choque y se adueñaron del balón en el centro del campo, causando mucho peligro a la zaga defensiva de un rival que empezó a perder la fuerza en ataque que mostró en los primeron compases de la contienda.

Aumentó sus ventaja en el marcador el Zapillo Atlético con otro tanto de Isidro, ésta vez desde el punto de penalti en el 18'. El veterano jugador del conjunto rojo está siendo uno de los protagonistas de su equipo en la lucha por evitar las posiciones de descenso.

Con un equipo local dominando, tanto en el marcador como en el terreno de juego, y un visitante al que los nervios le jugaban una mala pasada visto el panoráma del choque, se llegó al tiempo de descanso.

En la segunda mitad se pudo ver un juego más igualado aunque el Zapillo seguía siendo el que marcaba el ritmo de la contienda. La recta final fue para una Cañada que no tiró la toalla en ningún momento y que acortó distancias en el tanteador, a falta de cinco minutos para el final, pero que no pudo lograr finalmente ningún punto en su visita al Rafael Andújar. La Cañada tiene en la tabla un punto de ventaja sobre el Zapillo.