Vícar

Bautismo internacional para el Club de Montaña María

  • Cinco de sus miembros afrontarán una expedición de barranquismo en la isla portuguesa de Madeira

  • El alcalde, Antonio Bonilla, los recibe antes de su partida

Cinco miembros del Club de Montaña María integrarán la primera expedición internacional de este club vicario, que se va a realizar durante esta Semana Santa, para la práctica del barranquismo en la isla de Madeira (Portugal). Antes de su partida, el próximo viernes, los expedicionarios han sido recibidos por el alcalde de Vícar, Antonio Bonilla, y la concejala de Deportes, Vanesa Lidueña, quienes les han deseado la mayor de las suertes en esta aventura para la que llevan preparándose durante el último año. Los miembros del Club de Montaña María les hicieron entrega de sendas camisetas conmemorativas de la expedición Madeira 2018.

Antonio Bonilla agradeció la visita a los montañeros, a la vez que mostró su satisfacción por este bautismo internacional del club vicario,"que tan buena labor viene desarrollando en la promoción del deporte de montaña y naturaleza entre la población de Vícar, mediante jornadas de puertas abiertas, exposiciones y actividades, además del acondicionamiento de la vía ferrata del Barranco de Carcauz, la única existente en la provincia de Almería". El alcalde animó a los miembros de la expedición a disfrutar de esta aventura y a que sigan paseando el nombre de Vícar allá por donde vayan.

Ángel y José M. Torres, Alberto Moncayo, Paco Luis Fernández y el polaco Matche conforman la expedición que el próximo viernes partirá hacia Lisboa, para desde allí trasladarse un dia después en avión hasta Funchal . El domingo abordarán la primera de las cinco citas con otros tanto barrancos de la isla portuguesa. Ribeira Funda, Ribeira Infierno, Hortolá Inferior, Predra Blanca y Seixal Integral son los escenarios elegidos para esta primera aventura internacional por los cinco miembros del Club de Montaña María.

Más de doce meses de preparación por barrancos de Granada y Alicante, y horas y horas de intenso trabajo técnico y físico en Vícar para estar a punto han vivido los cinco barranquistas, a lo que se ha sumado el acopio de material así como la solicitudes de los permisos necesarios para llevar a cabo esta aventura en el paraíso atlántico, un lugar espectacular repleto de pozas, saltos, barrrancos y toboganes.

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