El rey Pelayo fue un monarca del siglo VII que es considerado como uno de los fundadores del que fue el Reino de Asturias. Su nombre es especialmente recordado por la relación que tiene con el proceso de avance de los reinos cristianos tras la llegada de los musulmanes a la península. 

Este rey que es recordado entre otros motivos por su participación en la batalla de Covadonga, murió de causas naturales en el año 737, en la localidad de Cangas de Onís donde estaba localizada su corte. Es en una pequeña iglesia que a día de hoy forma parte del concejo de Cangas de Onís donde se dice que don Pelayo fue enterrado originalmente.

La iglesia de Santa Eulalia de Abamia

La iglesia en cuestión se encuentra en la localidad de Abamia y se trata de la iglesia de Santa Eulalia. 

El templo que se puede visitar actualmente es una iglesia del siglo XII, se encuentra en un zona dolménica y de una necrópolis romano-vadiniense y se sabe que antes de esta iglesia existía un templo del siglo VIII. En el año 1962 fue nombrada Monumento Histórico-Artístico.

Por las diversas crónicas como la 'Crónica Sebastinense' se menciona que este templo fue el lugar de sepultura de don Pelayo, al igual que de su esposa Gaudiosa, quien murió antes que él. En este texto se establece que tras los 19 años que duró el reinado de don Pelayo, "falleció de muerte natural" y fue enterrado en la iglesia de Santa Eulalia de Velanio.

Los sepulcros de don Pelayo y Gaudiosa se encuentran, hoy vacíos, en el interior de la iglesia ya que, según el cronista Ambrosio de Morales, Alfonso X ordenó trasladar los restos a la Santa Cueva de Covadonga, aunque hay dudas de si esto ocurrió de verdad. En la iglesia de Santa Eulalia se encuentran también las laudas sepulcrales de la pareja, la del rey Pelayo incluye únicamente una espada.

En la cueva de Covadonga se puede visitar también el segundo sepulcro del fundador del reino de Asturias. En su interior hay también un túmulo de piedra en el que se dice que se encuentran los restos de don Pelayo y su esposa, mientras que en la cueva también se hayan los de su hermana Ermesinda y el marido de esta, Alfonso I. El sepulcro de don Pelayo en la Santa Cueva de Covadonga se encuentra en la pared derecha de la cueva, algo antes de llegar a la imagen de la Virgen.