La Universidad de Almería es un pilar fundamental para la sociedad almeriense. Y sin duda, es así atendiendo a la importancia que tiene desde el punto de vista de la labor que realizan sus profesionales por transferir ese conocimiento. En este contexto, ellos, son los investigadores, muchos desconocidos, son verdaderos artífices, con su trabajo, de que la vida de los almerienses sea mejor.
Uno de ellos es Juan Antonio López González, investigador del grupo ‘BIO-175. Desarrollo de tecnologías microbiológicas para mejora de suelos de interés agrícola’ en la Universidad de Almería.
Ingeniero Agrónomo por el propio centro almeriense, es también Máster de Investigación en Tratamiento, Gestión y Valorización de Residuos Orgánicos por la Universidad Miguel Hernández de Elche, en Alicante.
Realizó su Tesis Doctoral en el año 2015 bajo la supervisión de los profesores Joaquín Moreno Casco, María del Carmen Vargas García y María Josefa López López en el Área de Microbiología del Departamento de Biología y Geología de la UAL. Desde entonces, se convirtió en profesor sustituto interino de Microbiología en la universidad.
En su haber cuenta con una decena de artículos en los que ha trabajado como autor o coautor, y que han sido publicados en revistas de prestigio internacional (todos en Q1 y Q2), estando relacionados principalmente con la caracterización microbiológica del compostaje de residuos orgánicos, con las capacidades enzimáticas de dichos microorganismos, así como con la degradación de polímeros vegetales.
En cuanto a sus líneas de investigación actuales, estas se centran en la valoración de residuos agrícolas mediante compostaje, estudio de microorganismos lignocelulolíticos, biodegradación y reutilización de residuos agrícolas; y antagonismo y supresividad de microorganismos fitopatógenos.
Al ser preguntado por resultados destacables a lo largo de su carrera profesional, este investigador considera que en todas y cada una de las que ha formado parte, se ha conseguido mucha información para que se aclaren y puedan mejorar procesos de biodegradación microbiana de residuos orgánicos, ya que su acumulación supone uno de los grandes problemas a los que se enfrenta la sociedad presente y futura.
Juan Antonio López González explica que conoció la ciencia experimental a través de la realización de su proyecto final de carrera. “Una vez que descubres este maravilloso mundo creo que ya no puedes separarte de él jamás. Siempre hay nuevas preguntas a las que responde”, afirma este joven investigador, quien al ser preguntado por cual es su deseo científico confirma que desea “poder contagiar a la sociedad una pequeña parte de la pasión que siento yo por la microbiología”.
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