El sector ecológico ha valorado la Estrategia Ecológica 2018-2020 -algunas acciones como el estudio de vertebración o los acuerdos con los cuerpos y fuerzas de seguridad para perseguir el fraude ya se han iniciado- pero, sin un presupuesto, será complicado llevar a cabo sus más de cien líneas de actuación.

Las distintas fuentes consultadas por Efeagro han señalado que debería haber una partida concreta, incluso dentro de los Presupuestos Generales del Estado (PGE), si bien con unos presupuestos prorrogados para 2018 y, en el marco de austeridad financiera, esta cuestión no parece ser de fácil solución.

Han remarcado que la estrategia ha contado con una amplia participación y que se ha hecho eco de las principales preocupaciones del sector, incluso el estudio de la fiscalidad en la producción ecológica para que se refleje en el IRPF el beneficio que aporta para la sociedad y el medio ambiente.

Andalucía, tal y como informan desde Extenda (Agencia Andaluza de Promoción Exterior dependiente de la Junta de Andalucía), ocupa desde hace décadas posiciones de liderazgo en el desarrollo de sistemas de producción agraria sostenibles, de elevada calidad y mínimo impacto ambiental. La agricultura ecológica andaluza abarca casi un millón de hectáreas de cultivo (976.422 hectáreas), más de la mitad de la superficie ecológica total nacional, y dirige un 90% de su producción a los mercados internacionales.

En 2016 se certificaron 14.435 operadores (entre productores, elaboradores, importadores y otros comercializadores), un 8,5% más que el año anterior, doblando prácticamente la cifra en la última década (más del 90%). Almería está a la cabeza, con 2.969, que casi dobla su dato respecto a 2007, con un alza del 93%.