El sello emitido por Correos es de la tarifa A, lo que permite utilizarlo en cartas normalizadas de menos de 20 gramos a nivel nacional y su tirada es de 300.

Para su diseño se ha tomado como referencia el cartel conmemorativo del IV aniversario, obra de Felipe Herreros Rodero, quien cuenta con una gran cantidad de obras de temática religiosa y confrade. Se trata de un óleo en el que se muestra, sobre la fachada de la Iglesia de la Encarnación, a modo de cruz, la imagen del Cristo envuelto en un sudario.

El origen de esta imagen es un verdadero misterio, puesto que apareció al finalizar la Guerra de la Independencia en una vivienda propiedad de la familia Pérez Serrabona, situada en la Carrera del Carmen. Desde su aparición despertó gran devoción entre los velezanos y en torno a ella se fue constituyendo un grupo de hermanos que finalizaron creando la Hermandad de la Santa Vera Cruz y Sangre de Cristo en el 2010.

El historiador del arte Lázaro Gila Medina atribuye su realización a la escuela granadina de Alonso de Mena y se ha fechado en 1623. Está confeccionada en madera, a tamaño natural, sorprendiendo su gran realismo y su perfecto estudio anatómico. Posee los brazos articulados para representar la escena de la crucifixión de Jesús en la Cruz.

La talla fue restaurada en el año 2019 por Joaquín Gilabert y está considerada como una de las más valiosas y de mayor mérito artístico con la que cuenta la Diócesis de Almería, y una de las más importantes de Andalucía.

Su procesión principal se celebra el viernes a las 12:30 h. y es uno de los momentos más emotivos de la Semana Santa Velezana, declarada de interés turístico de Andalucía. Consiste en su traslado procesional a la Iglesia Parroquial de la Encarnación para realizar su espectacular Enclavamiento. La imagen es portada por “todo aquel que quiera” en tandas de seis horquilleros, que lo trasladan sobre sus hombros en su caja de madera acristalada, mediante continuos relevos. Es la única procesión sin cornetas y tambores, yendo acompañada solo por una banda de música y el silencio de los asistentes.

La imagen entra en la Iglesia de la Encarnación mientras suena la marcha “Descanse en paz”, de Javier José López Padilla, interpretada por la Agrupación musical Maestro Rojas, y la emoción invade a todos los asistentes. Comienza el emotivo Enclavamiento, dos cofrades (vestidos con traje de chaqueta negro y una capa blanca con las vueltas y cuello de raso rojo, con la insignia de las Cinco Llagas bordadas en su lado izquierdo) subidos en escaleras proceden a clavar las manos del Cristo de la Cruz y otro, desde el suelo, sus pies. A continuación, el que lo desea puede besar sus pies. Durante la celebración de los Oficios se procede al desenclavamiento y descendimiento para volver a depositar la imagen en la Caja.

Los sellos podrán comprarse a través de la Hermandad.