Almería

El paraguas sin abrir: ni rastro de las lluvias en un mal inicio del año hidrológico en Almería

El paraguas sin abrir: ni rastro de las lluvias en un mal inicio del año hidrológico en Almería

El paraguas sin abrir: ni rastro de las lluvias en un mal inicio del año hidrológico en Almería / Rafael González

Las temperaturas han bajado en los últimos días y la nieve ha hecho aparición en las sierras de la provincia, pero de las precipitaciones no hay ni rastro al menos hasta la fecha. No hay ni una sola comarca en la que se hayan registrado lluvias de consideración a lo largo del otoño y tampoco en lo que llevamos de invierno, sólo chubascos aislados que apenas han tenido incidencia en los registros pluviométricos de Almería. El año hidrológico, comprendido entre el 1 de octubre (2023) y 30 de septiembre (2024), ha comenzado tan mal como acabó el anterior y la precipitación acumulada se quedaría entre el 25 y 50% de los valores medios, muy por debajo de lo que llueve en ese periodo en relación a la serie histórica 1991-2020. Así lo recoge la Agencia Estatal de Meteorología en su balance hídrico nacional que contabiliza menos de 30 litros en buena parte de la provincia, algo más en determinados puntos del interior y la Alpujarra almeriense y un foco por metro cuadrado de sequía extrema por debajo de los 10 litros en el límite oriental con Murcia.

En la estación meteorológica de la AEMET en el aeropuerto las lluvias acumuladas hasta la fecha son 15,9 litros que representan un 56% de lo que habitualmente se registra hasta principios de año. En los dos embalses de la provincia, en Benínar y Cuevas del Almanzora, los volúmenes actuales son muy inferiores a los de la misma fecha del pasado ejercicio. El del poniente tiene 4,86 hectómetros cúbicos frente a los 8,72 que contabilizaba en enero de 2023 y ha recibido 44,6 litros por metro cuadrado, un tercio de lo que había contabilizado el pasado año (131). El embalse del levante se sitúa en 16,11 hectómetros frente a los 26 del curso anterior y han registrado 10,5 litros frente a los 30,3 del mismo periodo del ejercicio pasado que en su segunda mitad fue extremadamente húmedo superando con creces las lluvias habituales hasta alcanzar los 312 litros. Pero el dato más contundente lo ofrecen las 27 estaciones del Sistema Automático de Información Hidrológica (SAIH) de la red Hidrosur, principal indicador de la Cuenca Mediterránea Andaluza en funcionamiento desde 1991.

Ni diez litros por metro cuadrado

Todas presentan una pluviometría muy inferior a la de años anteriores, en algunas no se alcanza ni un tercio de lo que se había contabilizado en el último ejercicio hidrológico por estas fechas y en cuatro ni siquiera se han alcanzado aún, entre octubre y mediados de enero, los diez litros por metro cuadrado: Punta Entinas-Sabinar, Sierra Almagro, Río Almanzora en Serón y El Saltador. En otras dos, las de Albox y Cuevas están prácticamente igual aunque superen esa barrera, con 10,2 y 10,5 litros respectivamente. La estación albojense superó en el último año en su conjunto la media histórica de 244 litros y llegaron hasta 280 y en estas fechas ya habían contabilizado 31. Las diferencias con los valores medios son abismales. En el paraje natural de El Ejido-Roquetas apenas han recibido 1,5 litros por metro cuadrado frente a los 54,6 del año anterior en la misma fecha, nada menos que 30 veces menos y sin perder de vista que la media del ejercicio completo ronda los 206.

En Sierra Almagro se han recogido 7,8 litros frente a los 29,4 del año pasado, un cuarto menos que alejará el registro final mucho del valor histórico anual situado en los 254,9 litros por metro cuadrado. El tercero de los puntos por debajo de los diez litros por metro cuadrado se encuentra en el río Almanzora en Serón. Solo 6,6 frente a los 23,6 que habían contabilizado en las mismas fechas, casi un cuarto en una estación cuya media anual es de 289,7 litros. Y también tiene un registro mínimo, de hasta seis veces menos que el pasado año, la estación de El Saltador con 6 litros frente a 35. Aunque la treintena de puntos pluviométricos de la Red Hidrosur están por muy por debajo de las lluvias acumuladas el pasado año hidrológico hasta enero, hay diferencias importantes a lo largo de la geografía almeriense y en el Puerto de la Ragua han sido 76,7 litros por metro cuadrado, mientras que en Punta Entinas-Sabinar no llegan ni a 2. La estación de Felix es la segunda que contabiliza más lluvias con 55 litros, si bien quedan muy lejos de los 132 que tenían el pasado año por estas fechas.

Estadística Aemet: precipitaciones acumuladas en lo que va de año hidrológico Estadística Aemet: precipitaciones acumuladas en lo que va de año hidrológico

Estadística Aemet: precipitaciones acumuladas en lo que va de año hidrológico

Bayárcal presenta el tercer registro más alto con 49,2 litros, si bien el acumulado en la misma fecha del ejercicio anterior eran nada menos que 204,4 y la media histórica del año hidrológico en su totalidad que hoy parece inalcanzable se sitúa en 463,8. En Sierra Alhamilla también ha llovido un cuarto menos con 14,4 litros frente a 58,8, al igual que ocurre con el canal Benínar-Aguadulce (33,7 rente a 141,3) y río Almanzora en Cantoria (14 frente a 54,1). Las zonas que más se aproximan a los registros pluviométricos del curso anterior, pero siguen siendo inferiores, son Ohanes con 41 litros por metro cuadrado, apenas dos menos, y Sorbas con 20 frente a 25,4. En la Rambla de Tabernas y Velefique las precipitaciones acumuladas son de 17 y 18 litros por metro cuadrado, en Gérgal 21,2 y en la capital 26,5. En el Andarax, a la altura del municipio de Terque, el registro cae a la mitad con 29 litros frente a los 48,1 del pasado año y en Níjar contabilizan 25 frente a 87,8, sin olvidar que el pasado año se cerró un buen ejercicio con 305 litros por metro cuadrado.

Durante la madrugada del viernes se registraron precipitaciones muy localizadas en algunos puntos de la provincia, mínimas en su conjunto, pero de especial consideración en zonas como Bédar que recibió más de 20 litros por metro cuadrado o Las Negras en el término municipal de Níjar, una de las zonas más áridas de Europa, con casi 10 litros, según ha recogido la RedMeteoSE de la Asociación Meteorológica del Sureste (Ametse). El fantasma de la sequía sobrevuela de nuevo la geografía almeriense con especial preocupación de los regantes y agricultores que ven peligrar el futuro de unas cosechas que son uno de los pilares económicos de esta provincia y necesitan agua, aunque sea bien poca. Eso sí, todavía puede revertirse la situación como ya ocurriera en el anterior ejercicio hidrológico porque, pese a ser desastroso en su conjunto, arrancó de la peor forma, pero al sexto mes resucitaron los registros con el diluvio de marzo.

Largos periodos de sequía

Los pronósticos meteorológicos en el corto plazo no son nada halagüeños en materia de precipitaciones, pero nunca hay que dejar de confiar en una milagrosa aparición de intensas lluvias primaverales a partir del tercer mes del año. Porque la pluviometría almeriense se caracteriza por alternar grandes lluvias concentradas en poco tiempo y largos periodos de sequía con estadísticas muy dispares para localidades que no distan ni cincuenta kilómetros. Almería cerró un año hidrológico 2022/23 para olvidar con una pluviometría por debajo de la media histórica en buena parte de la provincia, después de vivir uno de los periodos más lluviosos desde que hay registros en el curso anterior en base a la monitorización de las 27 estaciones pluviométricas del SAIH perteneciente a la Cuenca Mediterránea Andaluza.

En ese ejercicio comprendido entre el 1 de octubre de 2021 y el 30 de septiembre de 2022, se presentó una meteorología completamente opuesta a la del resto del país y en determinadas zonas y comarcas se superaron en un 300% los parámetros históricos mientras que la península registraba el tercer año más seco desde 1961. En 20 de los puntos de medición se acumularon más lluvias que en el curso anterior, 18 estaban por encima de la media histórica y 6 batieron todos lo récord existentes duplicando algunas su nivel de precipitaciones más alto. Sin embargo, el siguiente año hidrológico fue extremadamente seco con registros inferiores a los del curso anterior en 24 de las 27 estaciones. Las diferencias en algunas comarcas fueron abismales como Tahal que pasó de 610 litros por metro cuadrado a 274 o Serón de 542 a 235.

Tags

Comentar

0 Comentarios

    Más comentarios