El recuento del voto CERA (Censo de Extranjeros Residentes Ausentes) ha reconfigurado la aritmética parlamentaria, y convierte a Junts y a Coalición Canaria en las llaves de la gobernabilidad. Ya lo eran -en especial el partido de Puigdemont- pero ahora ven reforzado aún más este rol.

Tras el escrutinio del voto extranjero, y a falta de la confirmación oficial, los 'populares' suman un escaño más por Madrid -pasan de 136 a 137- en detrimento del PSOE, que pasa de 122 a 121. Ese pequeño cambio da un vuelco al peso de los bloques que apoyan a Feijóo y Sánchez. El líder del PP contaría para ser investido con sus 137 diputados, los 33 de Vox y el de UPN, 171 en total. El actual presidente tendría más o menos seguros los de los socialistas (121), Sumar (31), ERC (7), EH Bildu (6), PNV (5) y BNG (1). También 171.

El desempate lo resuelve Junts, y, en menor medida, Coalición Canaria. La formación que lidera el fugado Carles Puigdemont ya era decisiva antes del recuento del voto CERA, pero bastaba su abstención para que Sánchez fuera presidente, ya que el bloque PSOE-Sumar-ERC-Bildu-PNV-BNG sumaban 172 escaños, por 170 de PP-Vox-UPN, al que ni siquiera con el apoyo del escaño de Coalición Canaria le hubiera dado para empatar.

Ahora, con el empate técnico, es necesario el voto afirmativo de Junts para investir a Sánchez, o al menos de uno de sus diputados -en caso de que Coalición Canaria se abstenga-, o de dos, en el supuesto de que los canarios voten en contra.

Cristina Valido, diputada electa por Coalición Canarias, y el presidente de las Islas, Fernando Clavijo

La formación canaria, por su lado, juega un curioso papel. El PP cuenta con ellos, y suma 172 escaños, pero Coalición Canaria está dispuesto a negociar la que llama "agenda canaria" tanto con PSOE como con los 'populares', con la línea roja de que ni Vox ni Sumar entren en el Gobierno. A priori, es más fácil que apoye a Feijóo -de hecho, ha alcanzado un acuerdo de coalición en las islas con el PP- pero si se da la carambola y se va al bando del PSOE no haría falta el voto afirmativo de Junts para investir a Sánchez. Simplemente su abstención. Este escenario parece muy improbable, y el PSOE es consciente de ello: ahora mismo, las declaraciones de todos sus dirigentes van dirigidas a presionar a Junts para que elija entre investir al actual presidente o repetir elecciones, un escenario que no gusta a un independentismo en retroceso. 

El portavoz socialista en el Congreso, Patxi López, lo ha vuelto a reiterar este sábado: será Junts quien tenga que decidir si prefiere un Gobierno "progresista" de "avance de libertades y derechos" o uno de "derechas con la ultraderecha" y de "retraso en la apuesta por la convivencia" y "confrontación".

El independentismo catalán se mueve

Este complicado contexto está sirviendo, además, para que ERC y Junts se planteen recuperar la unidad, al menos de cara a la galería, para salvar los muebles.

Este sábado la portavoz de ERC, Raquel Sans, ha reconocido que los republicanos están en conversaciones con el partido de Puigdemont en busca de una "unidad estratégica" para evitar un repetición de elecciones que "no interesa a la ciudadanía". "Hay conversaciones y voluntad de entendimiento" con Junts, ha dicho en una entrevista en el Canal 3/24l. La única manera de no repetir elecciones es el apoyo explícito a Sánchez, aunque las dos formaciones -ERC con la boca pequeña y Junts más maximalista- mantienen de momento sus reclamaciones, que "pasan por la amnistía y el referéndum y la necesidad de cumplir todos los acuerdos".

El PP, dispuesto a hablar con Junts dentro de la Constitución

Mientras, el PP, a través de su vicesecretario de Coordinación Autonómica y Local, Pedro Rollán, ha asegurado que Feijóo aspira a ser presidente con 172 escaños (da por hecho el apoyo de Coalición Canaria). Para eso, tendría que abstenerse alguno de los partidos del bloque de Sánchez -el preferido del PP es el PSOE, por eso de la tesis de dejar que Gobierne la lista más votada- o incluso Junts, lo que parece una quimera. 

Rollán, preguntado explícitamente por una posible negociación con el partido de Puigdemont, ha asegurado que el PP está dispuesto a hablar "con todas y cada una de las formaciones políticas siempre que estén dentro del marco de la Constitución española".

De momento, el hecho de ganar un diputado solo le sirve al PP para complicar más la investidura de Sánchez, pero Feijóo tiene casi imposible ser presidente del Gobierno, salvo sorpresa monumental.