Tiralíneas

Raúl Piñeiro

La historia interminable

COMO a la gran mayoría de la afición rojiblanca el asunto de la renovación de Emery me tiene cansado, que más que un culebrón parece la Historia interminable. El martes estuve pendiente de un desenlace que no llegó y que, en un principio, me cabreó, como a tantos rojiblancos. Desde luego, si hubiera tenido que escribir esta columna el martes por la noche, no habría dejado títere con cabeza, pues entonces entendía que la reunión de Águilas era lo más parecido a una parodia, ya que Emery había filtrado que quería una prórroga y al final, por H o por B, la había conseguido.

Sin embargo, con el paso de las horas, quiero creer los argumentos esgrimidos en el famoso comunicado oficial del club. Si lo miro de forma positiva, es muy posible que, efectivamente, el presidente se haya sacado un as de la manga con una oferta irrechazable, no tanto en lo económico (que también), como en lo deportivo, y eso explicaría las muchas horas que duró el encuentro. Quizás ya se estaba planificando la próxima temporada, o quizás no. Lo que está claro es que seguimos igual que antes de ayer o que hace un mes.

Mi impresión personal sigue siendo que está lejos del banquillo del Almería, pero también es posible que mañana renueve su contrato y me deje con la palabra en la boca...

MÁS ARTÍCULOS DE OPINIÓN Ir a la sección Opinión »

Comentar

0 Comentarios

    Más comentarios