El Centro de Educación Infantil y Primaria (CEIP) Posidonia, centro público bilingüe ubicado en Roquetas de Mar, celebró esta semana su primer encuentro de intercambio, dentro del proyecto Námana, con una mañana de convivencia con "La Malagasy Gospel", una coral de canto compuesta por niñas y adolescentes de los barrios más desfavorecidos de Tulear (Madagascar), y que constituye uno de los proyectos de la ONG "Agua de Coco". La delegada de Educación de la Junta de Andalucía, Francisca Fernández, visitó el centro y acudió a la actuación acompañada por la directora, María Isabel Bañares.

El proyecto Námana es un programa de hermanamiento entre escuelas de Madagascar y europeas, con el fin de promover intercambios culturales, provocando en los jóvenes un cambio de comportamiento más respetuoso con los demás, comprometidos con el espíritu de paz y solidaridad internacional.

Francisca Fernández destacó durante el encuentro la importante labor de concienciación de programas como éste , con actividades como la celebrada que "sensibilizan y dan a conocer los problemas de la infancia en distintos lugares del mundo, promoviendo sus derechos y el desarrollo de actitudes solidarias entre la comunidad educativa de nuestros centros". Según Fernández, "la educación para el desarrollo es una tarea asumida en nuestros centros educativos en el marco de la educación en valores y actividades como éstas lo reflejan".

A través de la ONG "Agua de coco", el CEIP Posidonia está hermanado con el colegio Las Salinas, en la región de Tulear, al sudoeste de Madagascar. Después de realizar algunas actividades previas en ambos centros sobre temas como la paz, los derechos de la infancia o el racismo, han contactado entre ellos por videoconferencia.

Esta es la primera vez que desde el programa Námana se realiza un intercambio presencial en el centro que, según señala la delegada de Educación, "pone un broche perfecto al acercamiento a otra cultura que este centro del Poniente almeriense viene realizando durante dos años", con actividades de concienciación, videoconferencias del alumnado, yrecaudación para realizar programas solidarios con implicación de las familias.

A través de este programa, el alumnado de los centros hermanados reflexiona sobre los problemas de la sociedad, los debate y compara sus puntos de vista, adquiriendo nuevos conocimientos sobre contextos que le eran desconocidos. Asimismo, aprende a usar sus derechos como ciudadanos, como son la libertad de expresión o la participación en la vida social y política, entre otros, y a definir el tipo de sociedad en la que querrían vivir, aprendiendo a poner en marcha estrategias diferentes de vida común, basadas en el diálogo en vez de en la corrupción o la violencia.