Bernabé López, Vocal en Córdoba del Colegio Profesional de Podólogos de Andalucía

Estudios de la pisada en consultas de Podología

EN España, afortunadamente el deporte tiene cada día más adeptos, y una salida sencilla en estas fechas navideñas a la hora de buscar regalos es optar por zapatillas deportivas. Pero ¿conocemos nuestra pisada para optar por un calzado deportivo u otro?

Desde el Colegio Profesional de Podólogos de Andalucía (CPPA) advertimos que el uso de unas zapatillas deportivas inadecuadas para el pie puede provocarle lesiones o hacer que la práctica deportiva se convierta en una mala experiencia. Cada vez hay más conciencia de utilizar una zapatilla deportiva diferentes para cada deporte. No es lo mismo salir de paseo que jugar al tenis o al fútbol. Conocer con exactitud el tipo de pisada y qué contrafuerte o tipo de calzado escoger, será fundamental para hacer deporte con seguridad y confort o por el contrario, para lesionarnos.

¿Quién puede realizar un estudio de la pisada? El podólogo. El grado en Podología cualifica para ser el profesional de la salud capaz de hacer diagnósticos clínicos y desarrollar técnicas de exploración, tanto manuales, como biomecánicas y de radiodiagnóstico, para poder elegir el tratamiento adecuado a cada tipo de pie.En la mayoría de los casos la mejor elección será una horma neutra complementada por un buen soporte plantar adaptado, y en otros muchos casos con un calzado adecuado podría ser suficiente.

Cada vez hay más conciencia de utilizar un calzado distinto para cada deporte

Realizar un estudio de la pisada va mucho más allá de identificar una tendencia supinadora, pronadora o neutra como nos hacen creer algunos establecimientos deportivos. El pie es la zona de la anatomía que más sufre con cada zancada y podemos reducir los factores de riesgo de lesiones. Se trata de analizar todos los datos del paciente, lesiones previas, peso, estatura, tipo de deporte, dismetrías corporales previas, alteraciones en pies, movilidad articular y muscular, presiones, tendencia supinadora pronadora, centro de gravedad… etc. Los medios técnicos han evolucionado mucho y podemos presumir de ser un sector al día con las tecnologías. Los estudios se realizan tanto en estática como en dinámica. Con todo ello , se procede a un diagnóstico que determinará si se posee alguna alteración o desalineación biomecánica o postural en el pie o miembro inferior, para hacer las recomendaciones oportunas. El estudio de la pisada requiere, por tanto, conocimientos específicos, con los que contamos los podólogos, en anatomía, patología o identificación de patrones anormales de marcha, entre otros. Un desacertado estudio de la pisada tiene consecuencias para la salud.

En esta línea, desde el CPPA, que fue creado en 1998, nos ocupamos entre otros objetivos, de sensibilizar a la ciudadanía sobre la salud podológica y dar a conocer la figura del Podólogo, sus funciones y competencias sanitarias para explicar a los ciudadanos el riesgo de ser atendidos por personal no cualificado. Así, se consiguió en su día la normalización de la Cirugía Podológica que nos autoriza a realizar intervenciones quirúrgicas en el pie y años más tarde con la Ley del Medicamento logramos mantener la prescripción de medicamentos por parte de los podólogos.

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