El fuerte ritmo que se ha impuesto a las obras de construcción de la ruta ciclista Eurovelo que pasa por la provincia de Cádiz, saliendo desde la capital y con una inversión superior a los 13 millones de euros, deja ya una imagen clara de cómo será, es, la nueva infraestructura.

El paso por la playa de Cortadura, polémica ante las críticas de grupos ecologistas al considerar que afecta de lleno a las dunas protegidas en esta parte del litoral gaditano, está casi terminado. Sobre una parte de la arena se han instalado pasos de madera elevados para atravesar las dunas. Una cuestión que se plantea es si el crecimiento natural de la arena acabará tapando algún tramo de este recorrido ciclista.

Desde hace unos días se está trabajando también en el pilotaje de la que será la pasarela que cruza el río Arillo, uniendo las orillas de Cádiz y San Fernando.

Una vez en La Isla, la ruta del Eurovelo-8 girará hacia Chiclana para completar trayecto en Conil. Una pequeña parte, en todo caso, de este ambicioso proyecto europeo pues el viaje termina, o se inicia, en Chipre cubriendo casi 7.000 kilómetros de carriles bici. Una vez estén concluidos todos los tramos, la ruta europea discurrirá por un total de 137 kilómetros dentro de la provincia de Cádiz. El proyecto se financia con fondos europeos.

La Fiscalía de Cádiz rechazó hace unos días la denuncia que los ecologistas habían interpuesto por el daño que consideraban se estaba produciendo en las dunas de Cortadura. Tras esta decisión, la delegada del Gobierno de la Junta en Cádiz, Mercedes Colombo, afirmó que “se puede ver que ha quedado fantástico, que protege las dunas de Cortadura, y que no provoca ningún tema medioambiental ni va en contra de la sostenibilidad”.

En un primer momento, la ruta del Eurovelo-8 iba a discurrir por el trazado interior de la Bahía, en paralelo a la vía del tren a lo largo de todo el istmo. Se conectaba de esa forma con el Parque Natural de la Bahía de Cádiz y, a la vez, con el carril bici urbano de la capital. Ahora, sin embargo, la ruta europea comienza la altura del Chato, por lo que habrá que definir cómo se llega en bicicleta a este punto de la carretera entre Cádiz y San Fernando.

La inversión pública, con fondos de la Unión Europea, que permite la construcción de este camino, que también facilitará el paseo peatonal entre Cádiz y San Fernando y que incluye la construcción del puente en el río Arillo, contrasta visualmente por la nula inversión pública a la hora de recuperar el Molino de Mareas.

Este histórico equipamiento se sitúa a escasos metros de la pasarela ahora en ejecución. Cuando ésta esté lista, supondrá un claro contraste con un edificio cada vez más cercano a la ruina total.