El Paseo de Almería se mete de lleno en la fase dos con bares y tiendas en desaceleración

Tras las tareas previas realizas en las últimas jornadas, el Paseo de Almería ha desplegado la alfombra de obras desde el nudo de Puerta Purchena hasta su cruce con la calle Rueda López, concadenando así fases en esta carrera del Consistorio hacia el cumplimiento estricto del plazo de ejecución global, de doce meses, y en aras de recuperar los tiempo perdidos en la primera tanda de trabajos, que debían haber estado finalizados el pasado mes de mayo.

La extensión de las obras hasta Rueda López responde al nuevo cronograma establecido, que ha dividido la segunda fase en dos subfases al objeto de evitar parones en los trabajos como los soportados por causa de desperfectos de la piedra natural escogida y problemas en el suministro de la misma, tiempos muertos que han generado, entre otras causas, malestar entre los comerciantes y hosteleros de la zona. De hecho, hay prevista una reunión mañana entre la dirección de Almería Centro y Ashal con comerciantes y hosteleros afectados por la remodelación y está prevista la comparecencia posterior ante los medios de comunicación de los presidentes de ambas organizaciones, Antonio Martín y Pedro Sánchez-Fortún, al objeto de informar “sobre los perjuicios que las obras del Paseo de Almería están ocasionando” a los negocios de la vía principal y aledañas. Se resienten de una bajada notoria de la clientela y hay casos, incluso, que han desembocado a la bajada de persianas durante la ejecución del proyecto.

El entorno está afectado con cambios de tráfico puestos ya en práctica y que, según trasladó el propio Ayuntamiento, fueron abordados con los comerciantes y hosteleros en el seno de la Comisión de Seguimiento de las Obras convocada la pasada semana y presidida por la alcaldesa de la capital, María del Mar Vázquez.

Cambios de tráfico

Se han establecido dos itinerarios habilitados para facilitar la circulación y acceder al Paseo. Un primer acceso es a través de calle Ricardos, incluyendo el itinerario el paso por las calles Dr. Gómez Ulla, Conde Ofalia y Lachambre, con cambios de dirección temporales en todas ellas). El segundo itinerario permite acceder al Paseo desde la calle General Tamayo, sentido del tráfico. Desde las calles Ricardos y Navarro Rodrigo, la entrada ya no es posible salvo para el uso de cocheras y aparcamientos, con clara señalización dispuesta por el Consistorio.

Esta fase, que abarcará todo el verano, es la que mayor impacto tiene sobre el tráfico. De hecho afecta a las entradas a los parkings, a los taxis (acomodan su parada en la antigua plaza Circular), y a la ruta del autobús del casco histórico, mientras que los contenedores de basura han sido reubicados. Entre ellos, los habitualmente situados frente a la galería comercial, frente a la plaza del Educador y en la esquina Paseo-Navarro Rodrigo. Los primeros han sido recolocados en la intersección con Rueda López. Los segundos, en la calle Conde Ofalia, mientras que los usuarios pueden encontrar los terceros en esta misma calle y en Gómez Ulla, según la información difundida en la página web Paseo de Almería Paso a Paso, donde el Ayuntamiento comparte los avisos de las obras a afectados y ciudadanía en general, así como el nuevo cronograma.