El mapa del porno en España tiene una sorpresa: Almería

Con 8,6 días al mes de consumo, la provincia supera con holgura la media nacional

Un informe desvela si los almerienses son más infieles que el resto

Imagen de archivo de un joven con un teléfono móvil.
Imagen de archivo de un joven con un teléfono móvil.

En la España del deseo digital, Almería se cuela entre las provincias que más veces buscan placer en solitario. Según el Estudio sobre Hábitos Sexuales 2025, la provincia andaluza registra una media de 8,6 días al mes de consumo de pornografía, una cifra que la sitúa en la élite del mapa sexual español. Muy por encima del promedio nacional (5,7 días), este dato revela una intimidad activa, habitual y menos encorsetada por el tabú que en otros territorios.

El mapa del porno.
El mapa del porno. / DDA

El dato convierte a Almería en una de las referencias nacionales en deseo individual según el estudio de Diversual. Solo provincias como Palencia (9,8 días) o Segovia (8,8) presentan cifras más elevadas, lo que posiciona a la provincia como uno de los territorios más intensos en el consumo de contenido erótico.

Más sexo, también en pareja

Pero Almería no solo destaca por el consumo individual de porno. También es una de las provincias con mayor frecuencia de relaciones sexuales con otra persona: 7,1 días al mes, frente a los 6,3 de media estatal. Este dato refuerza la idea de una provincia sexualmente activa, tanto en lo personal como en lo compartido.

Esta combinación de alta frecuencia en pareja y alto consumo individual no es contradictoria, sino complementaria. En un contexto donde el placer se busca de formas diversas, los datos de Almería sugieren una mayor naturalidad en la expresión del deseo y una menor presencia de tabúes.

No solo más sexo, también más placer

Además de tener más relaciones, en Almería se disfrutan más. La tasa de orgasmo en encuentros sexuales con otra persona alcanza el 81,5 %, una de las más altas del país. La media nacional se sitúa en el 75,4 %, lo que confirma que la experiencia sexual en la provincia no solo es frecuente, sino también más satisfactoria.

Orgasmo en España.
Orgasmo en España. / DDA

Este nivel de disfrute está por encima incluso de muchas grandes capitales, y consolida a Almería como uno de los territorios más placenteros del mapa sexual español. No se trata solo de cantidad, sino de calidad en la vivencia del sexo.

Más fieles que la media

En cuanto al plano emocional, Almería se muestra más fiel que la media. El 25,9 % de las personas encuestadas reconoce haber sido infiel en una relación estable, frente al 28,9 % nacional. Es un dato que refuerza la idea de relaciones afectivas más estables, pese a la intensidad sexual que muestran otros indicadores.

Esa fidelidad, sumada al alto nivel de orgasmos y la elevada frecuencia de sexo, dibuja un perfil equilibrado y saludable. No se trata de una provincia desbordada por el deseo, sino de una sintonía entre actividad, disfrute y estabilidad emocional.

Fantasías compartidas

En el terreno de las fantasías sexuales, Almería no se desmarca del patrón nacional. La más frecuente en la provincia es la de hacer un trío, igual que ocurre en la mayoría del país. Este tipo de fantasía es común tanto en hombres como mujeres, y habla de una imaginación sexual compartida y abierta a la exploración.

No obstante, Almería no lidera el ranking de fantasías llevadas a la práctica. Aunque el deseo por experiencias como tríos o sexo en lugares públicos está presente, los datos del estudio no indican que la provincia sea de las más atrevidas en convertir en realidad sus pensamientos más osados.

Un perfil singular

A diferencia de otras provincias con mayor consumo pero menos relaciones, o viceversa, Almería combina ambas cosas. Y eso hace que su perfil sea singular: más activo que el promedio, más satisfecho, pero también más estable.

El hecho de que consuma más porno no debe interpretarse como un síntoma de carencia, sino como una expresión más de una sexualidad rica y diversa. En Almería, el placer se busca en pareja, pero también se cultiva a solas, y eso forma parte del equilibrio moderno.

Almería aparece en este estudio como una provincia sexualmente viva, donde el deseo no se esconde, las relaciones son frecuentes y el orgasmo no es la excepción, sino la norma. Un territorio que destaca por su placer sin excesos y por una relación con el sexo más abierta que reprimida.

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