Otoño, el momento ideal para una escapada a Granada

Con la llegada del otoño, Granada se transforma en un escenario de postal: la Alhambra se tiñe de tonos ocres, el Albaicín huele a castañas asadas y la temperatura invita a caminar sin agobios. Desde Almería, a solo dos horas en coche por la A-92 o en tren Alvia, esta joya andaluza ofrece cultura, gastronomía y relax sin las multitudes del verano. El AVE desde Antequera reduce el trayecto a 90 minutos para quienes prefieren evitar la carretera. Planifica tu viaje y reserva hoteles en Granada para disfrutar de la ciudad en su versión más auténtica, con ofertas de última hora que incluyen desayuno andaluz.

La Alhambra y sus secretos menos conocidos

El monumento estrella brilla con menos visitantes. Compra entradas con antelación en la web oficial para evitar colas y recorre los Palacios Nazaríes al amanecer, cuando la luz dorada ilumina los patios y apenas hay turistas. No te pierdas el Generalife en esta estación: sus jardines están en plena floración otoñal, con rosas tardías y cipreses recortados, y las vistas a Sierra Nevada son espectaculares. Completa la visita con el Palacio de Carlos V y su museo, gratuito los domingos por la tarde para residentes UE.

Sube al mirador de San Nicolás para la foto clásica de la Alhambra al atardecer, pero explora más allá: el Albaicín guarda callejuelas empedradas, cármenes ocultos con patios floridos y teterías con vistas al valle del Darro. En Sacromonte, las cuevas convertidas en museos muestran la vida gitana, instrumentos antiguos y ofrecen espectáculos de flamenco íntimos con cena por 25 euros. Alquila una bici eléctrica en el centro para moverte entre barrios sin cansarte.

Gastronomía y excursiones que completan la experiencia

El otoño trae setas, caza y dulces conventuales de los monasterios. En el Realejo, prueba el plato alpujarreño en mesones tradicionales o el remojón granadino en mercados como San Agustín, donde los puestos ofrecen degustaciones gratuitas los sábados. No te vayas sin un chocolate con churros en la Plaza Bib-Rambla o una tortilla del Sacromonte en bodegas centenarias con barriles firmados por famosos. Los restaurantes del centro ofrecen menús del día por 12-15 euros con productos de temporada como setas de la Sierra o castañas de la Alpujarra. Prueba las tapas en la Carrera del Darro: piononos, habas con jamón, berenjenas con miel y vino de la tierra por menos de 3 euros el plato, acompañadas de guitarra en vivo los fines de semana.

Alquila un coche y visita la Alpujarra en una mañana: Lanjarón con sus aguas termales gratuitas en la fuente pública, Trevélez y sus jamones curados a 1.700 metros con catas en secaderos familiares, o Capileira con rutas de senderismo fáciles como el Barranco de Poqueira. Sierra Nevada abre pistas en noviembre para los primeros esquiadores, a solo 40 minutos, con forfait de día desde 35 euros. Para relax, las termas árabes de Hammam Al Ándalus ofrecen circuitos por 35 euros con masaje opcional. La oferta hotelera se adapta a todos los bolsillos: hostales boutique desde 50 euros en el Albaicín, apartamentos con vistas por 80 euros en el Realejo o palacetes con spa y parking incluido.

Granada en otoño es sinónimo de calma, sabores y belleza sin filtros. Desde Almería, es la escapada perfecta para recargar energías antes del invierno. Prepara la maleta, elige tu hotel y déjate llevar por la magia nazarí que enamora en cada rincón.