Las vitrinas de Unicaja Almería tendrán que esperar para dar la bienvenida al 30º título de toda su historia. Los verdes cayeron por 3-0 en la final de la Supercopa de España disputada en Los Planos ante un Club Voleibol Teruel que encadenó su quinta consecutiva y ya acumula nueve, dos más que un conjunto ahorrador que mostró numerosas carencias y que tendrá que trabajar a conciencia para pulir sus errores y poder llegar en las mejores condiciones posibles al comienzo de la Superliga Masculina 2020-2021.

Llegaba el cuadro ahorrador a tierras turolenses con mucha incertidumbre con respecto a su rodaje, sobre todo después de las dudas que generó en cuanto a juego en el torneo canario una semana antes, pero la ilusión, como siempre, era máxima ante el primer título oficial del curso. Era la 58ª final en el voleibol nacional para los almerienses, la 16ª de una Supercopa que habían levantado en siete ocasiones, una menos que los naranjas, que luchaban por su noveno cetro de un torneo que habían ganando en las cuatro ediciones anteriores de forma consecutiva. Frenar esta racha y volver a ganarla cinco años más tarde, desde que lo hiciesen en El Ejido el curso del histórico triplete, era el deseo de los de Manolo Berenguel.

Unicaja, que afrontó el encuentro con la baja del cubano Javier Jiménez, ya tuvo claro desde el inicio del choque que sería una batalla muy difícil, que cualquier mínimo error se pagaría caro. Y así fue. Ante Teruel siempre hay que estar al cien por cien y empezó a despegarse con el 9-7 en el marcador. Los aragoneses sacaron tajada del saque y se pusieron con un 17-12 que obligaba a los almerienses a arriesgar para no perderles de vista en un tanteador que fue de 21-16 al tiempo muerto que pidió Berenguel en la recta final. Gavenda lideró el ataque de un cuadro turolense que se llevó el primer set por 25-19.

Si en la primera manga Teruel dejó clara su superioridad, en la segunda lo hizo más aún aprovechando además las dudas de Unicaja Almería. Se descompuso el equipo almeriense, los nervios le jugaron una mala pasada y la falta de confianza lastró el trabajo en la pista de un conjunto que veía a su oponente alejarse 13-3 y más adelante hasta con una diferencia aún más grande (17-5). Los anfitriones fueron muy efectivos en el saque ante los ahorradores, que no estuvieron nada acertados en la recepción. Con el 20-7, Teruel allanaba el camino para hacerse con un 2-0 en el global tras ganar por 25-13 un segundo set que los de Berenguel, muy desconcentrados, estaban deseando que terminara. 

Los almerienses tenían que recuperar en el tercero una moral que había sido minada por su rival en el set anterior, que se rompió muy pronto a favor de los turolenses, que también comenzaron dominando en el tanteador en esta tercera manga. Pese a ello, Unicaja Almería empezó a encontrar su juego y meterse en el partido, pero seguía sin hacerlo efectivo en un luminoso en el que nunca se puso por delante. Los errores en saque de Gavenda daban algo de respiro a los de Berenguel. Con 18-13 el encuentro entraba en su fase decisiva. Los almerienses empezaron a recortar las distancias, no se daban por vencidos y ofrecieron sus mejores momentos de esta final en la que, sin embargo, no pudieron forzar el cuarto ser ni evitar la derrota. Con un 25-18, Teruel, muy serio durante toda la contienda, hacía el 3-0 para ganar por la vía rápida ante su eterno rival el primer título de la campaña.