Un grupo de valientes se subieron en la tarde de ayer a sus vehículos para demostrar que son los amos del volante sorteando obstáculos. Piruetas, saltos y trompos no faltaron en una prueba de conducción que tuvo lugar ayer en las afueras de Tabernas. Con ganas e ilusión varios jóvenes participaron en la gymkana automovilística, una de las actividades lúdicas enmarcadas en el programa de la feria y fiestas de Nuestra Señora de las Angustias.

Se trata de una actividad que ha despertado un gran interés entre los tabernenses, según ha declarado la alcaldesa de la localidad, Mari Nieves Jaén. Para participar, el requisito pagar la inscripción, 15 euros.

Han sido muchos los vecinos que se acercaron hasta el lugar de la carrera -acotada al público para evitar accidentes- para ver correr unos coches que han sido trucados para lograr más velocidad. Cualquier lugar fue bueno (montículos de tierra, cerros...) para contemplar los derrapes, trompos... que realizaron estos viejos coches tuneados por sus propietarios para la ocasión. Como anécdota, algunos coches tuvieron que se remolcados por los organizadores tras quedar atrapados en el agua existente en la rambla.

Tras el éxito, seguro que esta iniciativa, que parece haber sido acertada, volverá a reunir a los amantes de la velocidad en la próxima edición. Ahora toca seguir disfrutando de unas fiestas que aúnan tradición y modernidad. Unos festejos que los tabernenses disfrutan tanto de día afrontando el calor como de noche.