XX COPA DE CAMPEONES JUVENIL

Las Viñas, un feudo talismán para el Madrid

  • Los madridistas se imponen en la tanda de penaltis a una Real Sociedad que se adelantó en el marcador El conjunto blanco se proclamó ya el año pasado campeón de Copa del Rey en tierras veratenses

El Real Madrid juvenil sigue haciendo historia en Vera. Si el año pasado se proclamó, en ese mismo escenario, campeón de la Copa del Rey ante el Athletic, ayer se alzó con el título de campeón de España tras imponerse a la Real Sociedad en la lotería de la tanda de penaltis, en la que el guardameta madridista Sergio Rodríguez se erigió como protagonista al parar el último lanzamiento de los vascos.

El partido de ayer, y todo lo que rodeaba al torneo, estuvo marcado desde la noche del jueves por el terrible suceso ocurrido en Badajoz, donde cinco jóvenes futbolistas del Monterrubia fallecieron en un accidente de tráfico. El presidente de la Federación Andaluza de Fútbol (FAF), Eduardo Herrera, durante el almuerzo entre autoridades previo al duelo entre madridistas y donostiarras, quiso disculpar la ausencia de Ángel María Villar, presidente de la RFEF, que no pudo asistir a la gran cita juvenil por estar en tierras extremeñas.

Tras un emotivo minuto de silencio en memoria de los jugadores extremeños, ambos equipos saltaron al terreno de juego totalmente concentrados, sin arriesgar, sin ceder nada a su rival. En las quinielas los madridistas partían, en lo que a números se refiere, como favoritos, debido a los resultados obtenidos en cuartos ante el Barcelona (2-4) y frente al Racing de Santander en semifinales (4-6). Diez goles en dos duelos para los madridistas, muestra de su potencial ofensivo. No obstante, fueron los donostiarras, que llagaban de imponerse a Las Palmas (0-1) y al Málaga (1-2), los que inauguraron el tanteador. Corría el minuto 21 cuando Adrián Lapeña hizo subir el 0-1 al tanteador.

Lejos de desmoralizar al conjunto dirigido por Luis Miguel Ramis, el gol de los vascos despertó a los blancos, que poco después encontrarían puerta, pero Fernández Borbalán anuló el gol por llegar precedido de un empujón. Aún así, los de Jon Mikel Arrieta fueron los que mostraron más mordiente en ataque y pudieron hacer el segundo en un centro raso muy peligroso de Guridi que se paseó por el área sin encontrar rematador cuando corría el minuto 39. Finalmente, el marcador, con ventaja mínima para los donostiarras no se movería más en la primera mitad y el partido se fue al descanso.

Tras la reanudación, el Real Madrid fue el primero en avisar. Álvaro Jiménez lo intentó de vaselina, pero la ocasión no fructiferó. Corría el minuto 51. Los madridistas ganaban terreno y sus acercamientos cada vez eran más peligrosos. En el 61', gol anulado a Marcos Legaz por fuera de juego. La suerte cambiaría para los madrileños en el minuto 63. Penalti a favor del Real Madrid que transformaría el propio Legaz para imponer tablas en el marcador. Se tornaría entonces el duelo en un encuentro de ida y vuelta, sin un dominador claro. Ambos decidieron colgar balones al área, en busca del gol de la victoria. Álvaro Jiménez, de cabeza, remató fuera un centro de Cristian Artiles en el 88'. La última clara del tiempo reglamentario la tuvo la Real, en un centro de Roberto Olabe que no encontró rematador (91'). El choque se iría a una prórroga en la que dominó más el Real Madrid, pero la ocasión más clara fue para el equipo vasco. La salvó con una gran parada el meta madridista Sergio Rodríguez. La final se resolvería en una tanda de penaltis que se alargó hasta ocho lanzamientos por cada equipo y en la que el cancerbero blanco volvió a tomar protagonismo.

Comentar

0 Comentarios

    Más comentarios