La directora Yolanda Centeno presenta en el Patio de Luces su última ópera prima, ‘Tras el verano’

Una historia que habla de afectos, poniendo los derechos del menor en el epicentro del debate y una pregunta muy importante. ¿Qué es más importante, el ADN o los sentimientos?. Es la trama de Tras el verano, la última ópera prima de la directora Yolanda Centeno, una película que fue presentada en el Patio de Luces de la Diputación. Precisamente su directora, y también guionista, fue la encargada de presentar este trabajo, de poco más de 90 minutos de duración, acompañada por la actriz Stephanie Magnin. El director de FICAL, Enrique Iznaola, fue el encargado de dar la bienvenida a todos los asistentes.

Centeno explicó que “realmente la idea comenzó con un cortometraje pero me di cuenta que en un corto no cabía y fue cuando decidimos hacer un largometraje”. Además, Stephanie Magnin aseguró que “había que encarnar una hermana que tiene sus propios hijos, que sabe lo que es ser madre biológica y que quiere imponer su propia idea de ser madre con sus hijos biológicos y que, en cualquier momento, se puede pelear con su pareja”.

‘Tras el verano’ cuenta la historia de Paula, Raúl y Dani, una familia más. Sin embargo, es importante destacar que Dani no es hijo de Paula, interpretada por Alexandra Jiménez. Esta se enfrenta con el reto diario de encajar en una familia reconstituida. Este conflicto, unido a una crisis de pareja, hace que Paula pueda dejar de ver para siempre a Dani, creando un debate sobre la importancia, o no, del ADN o de los sentimientos de Paula hacia el niño.