Manda huevos

Yno hablo de la gripe aviar y su repercusión directa sobre los precios, sino de otra esperpéntica escena que tiene como protagonista una vez más a Luis Rubiales. Lo de los huevos con los que el ex capo de la federación fue agredido en la presentación de su libro “Matar a Rubiales” es una imagen propia de barrabravas dispuestos a reventar un acto o lo que sea. Y la reacción de Rubiales, por supuesto que estuvo a la altura de las circunstancias tratando de llegar hasta el agresor, que resultó siendo familia directa del ex dirigente. Un sainete bochornoso sacado de la España cañí, como aquel gesto del ex presidente de la RFEF cogiéndose los genitales en plena celebración del campeonato logrado por la selección femenina de fútbol, a escasos metros de la reina de España. Al final nos enteramos que el agresor es el hermano pequeño del padre del ex jugador, de profesión actor, y entonces muchos abrimos la puerta a la posibilidad que sea una estrategia de marketing con el objetivo de vender libros. Desde luego que de ser así, lo de los huevos es de absoluta actualidad y todavía aparece en las noticias. Si es una estrategia comercial, el barro es donde mejor se mueve Rubiales y después de lo de Jenni Hermoso, todo lo que venga es peccata minuta. El caso es que Rubi vuelve a tener un papel principal en la escena de la desvergüenza nacional y yo no descarto que sea convocado por Santiago Segura para la saga de Torrente. Aunque corra el riesgo, el director digo, que el granadino le quite del personaje.

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