El centro del campo del Almería, el bendito dilema de Rubi

Uno de los grandes quebraderos de cabeza del cuerpo técnico durante la pasada campaña fue la configuración en el centro del campo. En el inicio de la segunda etapa de Joan Francesc Ferrer Sicilia 'Rubi' en el banquillo del Almería, Édgar fue el mediocentro posicional del equipo. La salida de César Monte y el mal arranque liguero obligaron al catalán a retrasar su posición, en una línea en la que Lucas Robertone, Iddrisu Baba y Gui Guedes acabaron pasando por el quirófano. Dion Lopy y Gonzalo Melero fueron los únicos futbolistas que tuvieron cierta regularidad, con los problemas físicos del madrileño, que le impidieron alcanzar su mejor versión.

Todos esos contratiempos se han convertido en soluciones. En el encuentro contra el Deportivo de la Coruña, el equipo no contó de inicio con su mejor futbolista para la medular (Dion Lopy) y la sala de máquinas siguió funcionando. De hecho, la UDA ha sumado siete de nueve sin la presencia del senegalés, que volverá el próximo sábado. Un bendito problema para el entrenador rojiblanco, que tendrá que elegir dos cartas en una baraja de total garantías. “Tenemos a siete jugadores para dos sitios. La competencia es grandísima. En este equipo pueden ser todos titulares. La temporada es muy larga y habrá un proceso en el que unos empezarán y otros acabarán los partidos”, aseguró el preparador en la previa de la última jornada.

André Horta tuvo su primera titularidad en Riazor acompañado de Stefan Dzodic. Los dos futbolistas cumplieron con nota, al igual que Iddrisu Baba y Gui Guedes, que tuvieron minutos en la recta final del partido y le dieron el impulso necesario al conjunto almeriense para terminar controlando la contienda y evitando un último aluvión de los blanquiazules. Selvi Clua y Lucas Robertone no participaron, pero son las dos piezas restantes del puzle de la UDA para la línea central.

Cuestión de perfiles

Dentro de las variantes tácticas con las que cuenta el entrenador catalán, Iddrisu Baba, Stefan Dzodic y Selvi Clua son los mediocentros de contención, necesarios para un equipo que presenta a cuatro atacantes en el once. Gui Guedes y Dion Lopy tienen la capacidad de abarcar muchos metros y ser complementarios con todos los demás, lo que supone un punto a favor para tener más protagonismo en el equipo. André Horta y Lucas Robertone, este último sin oportunidades debido a que estuvo durante todo el verano en la rampa de salida, son perfiles más ofensivos, con una vocación para jugar hacia delante.

La mejora en el aspecto defensivo, además de la irrupción de la pareja formada por Nelson Monte y Federico Bonini, también recae en un doble pivote en el que cada semana hay un futbolista que levanta la mano para pedir la titularidad. Las posibilidades, dentro de las figuras en esta posición tan determinante para el sistema de juego de los rojiblancos, son cada vez mayores. La personalidad mostrada en La Coruña es el camino por seguir en un tramo de temporada en el que el equipo tiene en su mano conseguir la velocidad de crucero.