Lopy apunta a baja para Riazor

La Unión Deportiva Almería ha retomado este martes los entrenamientos con la mente puesta ya en la cita del próximo sábado en el Estadio Riazor-Abanca ante el Deportivo de la Coruña, colíder de Segunda junto al Cádiz. El ambiente esta semana está siendo muy apacible tras los triunfos ante Sporting y Las Palmas y el equipo iniciaba la sesión con un 'pasillo de collejas' para celebrar el 24º cumpleaños de Sergio Arribas y la internacionalidad absoluta de Marko Perovic.

La próxima cita es exigente y Rubi ya sabe que no podrá contar con su póker de delanteros en tierras gallegas. Adrián Embarba fue expulsado en el Estadio de Gran Canaria por ver doble cartulina amarilla, la primera de ellas evitable al lanzar un segundo balón que había sobre el campo contra un rival, por lo que el extremo madrileño, pichichi del equipo junto a Arribas, causará baja para dicho desplazamiento.

Arnau Puigmal o Patrik Soko asoman como principales candidatos para suplir su ausencia. El atacante camerunés podría partir desde la banda diestra esta vez, recuperando Leo Baptistao la punta de ataque tras partir de suplente en las islas. Otra opción es apostar por Puigmal, si bien suele rendir mejor como revulsivo. La tercera alternativa pasaría por variar el dibujo para contar con un centrocampista más, bien Iddrisu Baba o bien André Horta en caso de que repitiera con el doble pivote Gui-Dzodic, titular en las dos últimas salidas.

Quien parece que no va a entrar en las quinielas en esa demarcación una jornada más es Dion Lopy. El internacional senegalés arrastra todavía molestias de los problemas en la musculatura del aductor que se produjo ante el Sporting y que ya le impidieron viajar a las islas y aunque evoluciona favorablemente, lo previsible es que Rubi no quiera forzarlo ante la exigencia del duelo. Esta mañana ha trabajado al margen a las órdenes del readaptador físico Álvaro Cano, mientras que el central Federico Bonini ha gestionado cargas en manos de los fisioterapeutas.