Con Kai deja K.O. al Nueva Delhi, así de rotunda ha sido la presentación del último lanzamiento de Sakata en calabacín y el primero en incluir la resistencia a Nueva Delhi. El campo almeriense ha estado unas semanas esperando a que ‘el secreto para ganar la batalla’ fuera desvelado y al fin hoy Sakata ha presentado a Kai en una jornada en San Silvestre. Cecilio Fernández, product promoter de calabacín y pepino, está seguro de que esta variedad va a tener un excelente acogimiento: ‘el virus del Nueva Delhi supone una gran preocupación para los agricultores y la demanda de variedades con resistencia es clara. Además de contar con ella, el punto fuerte de Kai es ofrecer una gran rentabilidad para el agricultor, pero sin olvidar aspectos tan importantes como son la producción y la calidad de fruto’. Cecilio ha explicado cómo Kai logra reducir significativamente la mano de obra y los costes: ‘por su tallo erecto requiere menor frecuencia de entutorado y por su porte de planta abierto facilita la aplicación de fitosanitarios y la recolección del fruto’. Además, Kai permite que esta recolección se haga “a pellizco”, previniendo la transmisión mecánica de Potyvirus.

Kai es una variedad para el segmento temprano, con trasplantes de agosto y de febrero a marzo. Cabe destacar que, en este segmento, los agricultores valoran muy positivamente la precocidad de una variedad. En ese sentido Matías García, responsable comercial de Sakata en Almería, ha resaltado que ‘Kai es una variedad precoz y que además se regula muy bien con calor, siendo muy generativa y gracias a esto se obtiene una muy buena producción’.

En cuanto a los frutos, cilíndricos y rectos, presentan una alta uniformidad en toda su longitud y durante todo el ciclo. La variedad de Kai mantiene la calidad de fruto a la que acostumbra la genética de Sakata: un color oscuro, brillante, con una mácula y cicatriz pistilar pequeñas y una excelente postcosecha.

Otro nuevo lanzamiento para el levante almeriense

Sakata también tiene previsto este mismo viernes lanzar una nueva variedad para la zona del levante concretamente. Se trata de Isleta, un calabacín que cubre las necesidades del agricultor de la comarca de Níjar: la alta producción. Al igual que Kai, Isleta está recomendado para segmentos de verano y primavera, con trasplantes de agosto y desde mediados de febrero a marzo. Es una planta muy adaptada a la zona, muy productiva con calor y cuyo formato de frutos se ajusta perfectamente al mercado eco.