'Abuelos Felices', la única teleasistencia almeriense reconocida de interés social

El sector privado en el ambito de la teleasistencia cobra fuerza en la capital ante las cifras publicadas por el Servicio Andaluz de Teleasistencia donde se reconoce atender una media de 1 millón de peticiones en la provincia de Almería. Frente a esto,los recortes presupuestarios de la Junta de Andalucía llevaron a principio del 2013 al Ayuntamiento a instalar un copago provisional de esta prestación, que supone una cuota de entre 4 y 11 euros para los usuarios con el fin de cubrir los 80.000 euros que se estima desde el consistorio que se lleva de media la atención a la tercera edad desde el domicilio.

'Abuelos Felices' es uno de los centros que se ocupan del cuidado de personas mayores abonados a sus servicios y la única empresa almeriense dentro del sector privado que ha sido declarada como interés social desde 2007 por la Junta de Andalucía, reconocida a sí misma como organización sin ánimo de lucro pero que si ha establecido una tarifa para sus usuarios. Francisca Esteban, es la directora del centro almeriense que cuenta al Diario de Almería como funciona esta empresa que según ella misma "cuenta con los recurso justos para satisfacer las necesidades de manera digna y lo mejor posible, eso sí no pagamos IVA, damos una función social". Profesionales del sector sanitario, entre enfermeros y médicos que se vuelcan en su trabajo intentando darles un trato cercano y familiar sin contar con ningún tipo de subvenciones. " no queremos el dinero de los españoles, nunca ni lo hemos pedido ni lo hemos recibido", reconoce Francisca Esteban cuando hace referencia a la forma de financiación de Abuelos Felices. La tarifa suele ser de 8 euros por hora de asistencia, desde compañía hasta curas y tratamientos pero siempre teniendo en cuenta las rentas y situaciones personales de cada uno de los ancianos y enfermos a los que tratan.

"Somos la única emrpesa de Almería que estamos tan volcados en la asisetencia en casos de cáncer terminal, queremos que el paciente muera tranquilo en su casa" reconocen en Abuelos Felices, cuando cuentan la variedad de tratatamientos y el amplio abanico de usuarios.