El 1,4% de los desplazamientos que se realizan en Almería son sobre una bicicleta. Pero hay hechos que indican que el próximo dato no tendrá nada que ver. Almería se ha subido a la bicicleta de una forma sin precedentes. El boom del deporte ha afectado a la provincia como a pocas y el ejercicio más lógico para entender este movimiento es salir a la calle y mirar. Las calles están plagadas de bicicletas de montaña, carretera y urbanas y hay tres ciudades que están liderando este auge gracias a la implicación de las administraciones en convertirlas en ciudades amables: Almería, Roquetas y El Ejido han creado una red de vías ciclistas que ya no hacen a los deportistas los poseedores únicos del placer de pedalear, pues abren el abanico a aquellas personas que encuentra en este medio una forma más de desplazarse.

En Almería se venden de media durante los últimos años 9.000 bicicletas. O lo que es lo mismo, el doble que motocicletas y automóviles juntos. Está claro que su precio es menor y asegura desplazamientos cercanos, pero también indica la consolidación de un sector que cada vez empieza a ser mejor visto por los ojos de la ciudadanía, aunque a muchos conductores les cueste todavía ver al ciclista como un usuario más sobre la calzada, y tanto por derechos como por obligaciones, lo es.

En cuanto al lugar donde se compran las bicicletas, los clientes siguen prefiriendo los establecimientos especializados, que acaparan casi la mitad de los clientes, aunque en las últimas fechas están ganando potencial las grandes superficies y las cadenas de distribución de deporte, algunas de ellas implantadas recientemente en la provincia.

En cuanto al tipo de bicicleta que se vende. La reina sigue siendo la de montaña, con más de un 40% de las ventas totales. Aunque año tras año le recorta terreno la de carretera, quizás porque se esté perdiendo el miedo a eso de ir entre coches o porque se están encontrando rutas en las que el mayor riesgo es el descontrol de tu propio ritmo. Estas ya representan un 23%, terceras tras las adquiridas para los pequeños de la casa.

n los pronósticos de la Junta de Andalucía y Ayuntamiento de la capital entraba en escena un factor tan subjetivo como el éxito del Plan Andaluz de la Bicicleta en determinadas ciudades), el gasto que se realiza en los carriles bicis se verá rápidamente compensado en otro ahorro, el de combustible y emisión de gases. Es pronto para hacer las cuentas, máxime cuando el periodo de tiempo de la explosión de la bicicleta en Almería suma apenas tres meses. Pero sí, la ciudad se ha llenado de gente que acude al trabajo, a sus quehaceres o a ver a sus amigos en bicicleta haciendo uso de los nuevos carriles. Eso ha animado el ejercicio de un deporte antes de adicción mediana-baja y ahora, sin duda, en sus mejores momentos. El ozono troposférico y las partículas han sido los contaminantes más problemáticos en la provincia de Almería . El caso es que los niveles de medición de la calidad del aire que diariamente realiza la Junta de Andalucía conceden a la capital una leve mejoría,

Los niveles de Ozono (O3) han descendido una media de 5 microgramos/m3 en las últimas fechas. Un rango apenas perceptible y que no consuma un hecho o conclusión que se vaya a mantener en el tiempo. Algo similar sucede con el monóxido de carbono (CO), donde los niveles también se vienen reduciendo en 1,5 puntos porcentuales.