Almería cierra 2011 con menos viajeros, pero una mayor estancia media
La cifra de pernoctaciones del pasado año en la provincia fue de 4.357.352, lo que supone un descenso de 211.347
El turismo de Almería, uno de los pilares de la economía provincial, no se ha podido subir al carro de la recuperación y cerró 2011 con un leve descenso en los viajeros y pernoctaciones que contrasta con el incremento e incluso el récord que han logrado otras provincias y comunidades autonómas, como Andalucía, a pesar de la crisis. Los establecimientos hoteleros de la provincia recibieron 1.112.418 turistas en 2011, lo que se traduce en 57.712 menos que durante el ejercicio anterior cuando se llegó a una cifra de 1.170.130, según los datos publicados ayer por el Instituto Nacional de Estadística (INE). Eso sí, la cifra de turistas extranjeros está experimentando un incremento en los últimos años y en 2011 la subida ha estado en torno al 18%, según avanzó la delegada provincial de Turismo, María Dolores Muñoz, días antes de la celebración de Fitur, con un total de 162.693 viajeros de otros países.
Los datos de pernoctaciones también experimentan un claro retroceso desde las 4.568.699 que se alcanzaron en 2010 a las 4.357.352 registradas durante el pasado año. El descenso de 211.347 pernoctaciones vuelve a incidir en un maltrecho sector, el de los establecimientos hoteleros, que sufre uno de sus peores momentos y con precios mínimos muy inferiores a los de cualquier otro país de Europa. Los turistas extranjeros suman 832.863 del conjunto de las pernoctaciones.
La estancia media es el único de los indicadores turísticos que ha hecho público el INE que sufre una leve mejoría en la provincia. Se ha pasado de los 3,9 días por visitante a los 3,92, la mayor cifra de Andalucía, cuya media se ha quedado en 2,85 días por turista. Por detrás de Almería aparecen Málaga con 3,68 y Huelva con 3,58.
El número de establecimientos hoteleros de la provincia, según el Instituto Nacional de Estadística, es de 178 de los 2.392 que existen en la comunidad autónoma. Se alcanzan las 29.251 plazas con un grado de ocupación del 40,05% que sube al 43,15% en los fines de semana. El personal empleado en los alojamientos almerienses es de 2.506 personas como media anual, números que quedan muy lejos de los 11.318 trabajadores de la Costa del Sol o los 5.233 de la provincia de Cádiz.
Los indicadores hablan por sí solos y requieren un esfuerzo de las administraciones y el sector. Mientras el turismo crece en la mayoría de provincias andaluzas, Almería se estanca y retrocede. La marca requiere un impulso.
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