Sus cuatro motores y un tanque de ocho litros, le permite tratar hasta una hectárea en tan solo diez minutos de vuelo. Es el ‘caza’ de combate que ha venido a sumarse a las labores desinsectación del Ayuntamiento de Almería centradas, especialmente desde las lluvias de mayo, en que los residentes en el término municipal no tengan que lidiar con multitud de mosquitos y sus temidas picaduras. O, al menos, aplacarlas todo lo posible.

Es el dron que el programa de la ‘Triple D’ (desinfectación, desinsectación y desratización), ha incorporado a sus filas, reforzando los medios humanos y mecánicos disponibles por la empresa contratada para su ejecución por el Ayuntamiento de la capital, Athisa.

Manejado por un piloto, dispone de un tanque y sistema de pulverización.

Tipo Multirrotor de cuatro motores, con un peso máximo con carga de 24,8kg y una cámara de visión, su principal ventaja, y razón de su entrada en funcionamiento, es que “permite llegar donde las personas y los vehículos de fumigación no pueden”, explica el actual concejal de Sostenibilidad Ambiental, Antonio Urdiales. Son zonas apartadas y en las que puede existir aguas estancadas, donde proliferan los huevos, larvas y pupas.

El programa cubre “las zonas urbanas de todo el término municipal”, si bien, como aclara el responsable municipal, estos servicios no pueden ser prestados en propiedades privadas como chalets y para el vuelo de este dron se requiere, además, autorización por parte de Aena.

El programa de las ‘Tres D’ está activo durante todo el año, aunque se refuerza en los meses de calor y tras las lluvias en esta guerra contra los mosquitos. “Todas las semanas estamos haciendo tratamientos y seguimiento del nivel de población. Desde mayo, y para el control de mosquitos, hemos estado reforzando en las zonas de Cabo de Gata, La Fabriquilla, Pujaire y La Almadraba”, detalla Urdiales, quien apunta que este dron se suma a los servicios diarios una semana al mes.

La alcaldesa ha comprado recientemente la efectividad del dron.

Su sistema de pulverización volverá activarse, según el calendario de trabajos de Athisa, la semana correspondiente al 13 de julio, cuando de nuevo esparcirá la bacteria Bacillus, tóxica para las larvas de los mosquitos, moscas negras y mosquillas e inocua para a otros insectos y fauna vertebrada.