Almería, entre las pocas provincias donde llegan más trabajadores de los que se van

En 2016, Almería sostenía 327.187 contratos de trabajo, de estos 276.522 no suponían ningún desplazamiento al resto de España. Y entre los que sí requirieron traslado interprovincial, Almería obtuvo un saldo positivo de 961 personas, convirtiéndose en una de las pocas provincias españolas que no perdió trabajadores dentro de este intercambio en 2016 -tan solo 17 provincias-. Su dinámica, en este ámbito, viene siendo positiva desde el año 2012 tras haber sufrido un goteo incesante de pérdida de trabajadores desde 2007. El año pasado se marcharon 49.704 trabajadores y entraron 50.665 según los datos registrados por el Observatorio de las Ocupaciones del Servicio Público de Empleo Estatal.

Almería recibe, sobre todo, a trabajadores de entre 30 y 45 años (un total de 25.481), pero también son los habitantes dentro de este segmento de edad los que más deciden marcharse (25.572), estableciendo un saldo negativo de 91 personas. Cada vez hay menos jóvenes de 30 años evaporándose del entramado laboral almeriense, aun así, el saldo también sigue siendo negativo y en 2016 fue de menos 400. Donde sí se ganan empleados en el grupo de edad de mayores de 45, con un aumento de 1.452 empleados.

La mayoría de los trabajadores que abandonan Almería no pueden acreditar sus estudios o solo han superado los primarios (33.940). Son también estos los que más llegan (30.953). Sin embargo, el saldo negativo que más le pesa a la provincia es el de los titulados superiores, pues tras invertir en una educación de garantías, Almería sigue perdiendo a sus empleados más cualificados. En 2016, el saldo fue negativo (-796 personas). El mayor saldo (de 3.551 personas) fue registrado en personas que han superado la Educación Secundaria Obligatoria.

Más de la mitad de estos desplazamientos interprovinciales han sido protagonizados por extranjeros. Durante el año pasado se marcharon 28.968 encontraron trabajo en otra provincia y 34.117 lo obtuvieron en Almería, por lo que, en este sentido, el saldo sí es positivo, quebrando una dinámica contraria que se estableció en los años de crisis. El flujo de trajabadores con nacionalidad española sí resulta negativo para la provincia almeriense, con una pérdida de 3.302 empleados.

Por sectores económicos, el que más gente arrastra a Almería es el sercicios, con un total de 24.387 nuevos contratos, el problema es que durante 2016 se perdieron casi el doble (56.270). En el ámbito de la construcción, el saldo también es negativo (-9.769).

La mayoría de los contratos que no requieren movilidad en Almería, dependiendo están relacionados con los servicios de restauración, protección y comercio (185.789 empledos). Aquí, la movilidad entre provincias tiene un saldo negativo de 10.819 trabajadores.

A rasgos generales, únicamente ha habido cinco provincias que han visto reducido el número de entradas: Lugo, Badajoz, Ceuta, Zamora y Cantabria. Por el contrario las que más las han incrementado han sido Zaragoza, Las Palmas, Palencia, Santa Cruz de Tenerife y Almería.

Almería exporta principalmente trabajadores a Murcia (un total de 18.235 en 2016), Granada (8.660), Madrid (2.543), Jaén (2.513) y Alicante (2.104). Importa principalmente contratos de Murcia (14.908), Granada (6.073), MAdrid (4.081), Huelva (2.551) o Jaén (2.476 en el periodo de 2016).

Desde el año en que comenzó la crisis (2007) hasta el actual, Almería ha mandado a otras provincias 43.500 contratos al año y ha recibido casi 46.000, por lo que a pesar de la inestabilidad generada durante este periodo, no ha sido de las provincias peor paradas en este aspecto.

Con respecto a la movilidad entre provincias dentro de la misma comunidad , el de Granada a Sevilla presenta mayor proporción de mujeres; de Jaén a Málaga se mueven losmenores de 30 años mientras que entre Jaén y Córdoba, los mayores de 45 años. En losdesplazamientos entre Almería, Huelva y Jaén predominan los extranjeros y en todos predominan las actividades agrícolas.

El destino de los flujos con mayor proporción de contratos agrícolas son Jaén, La Rioja, Huelva, Cuenca y Albacete. Los flujos con mayor número de contratos se dan entre Alicante y Murcia, Córdoba y Sevilla y Murcia y Almería, todos ellos en ambas direcciones.

En agricultura, ganadería, silvicultura y pesca, los principales destinos han sido Murcia, Jaén, Valencia, Huelva, Sevilla, Albacete, Córdoba, Almería, Granada y Alicante. Es la actividad con mayor volumen de desplazamientos y la segunda con mayor tasa de movilidad. Entre los que se desplazan hay predominio de hombres y de extranjeros con importante presencia de mayores de 45 años. Las principales ocupaciones son Peones y Trabajadores agrícolas.

En cuan to al transporte y almacenamiento, los principales destinos han sido Madrid, Barcelona, Guadalajara, Toledo, Murcia, Alicante, Almería, Sevilla, Valencia y Bizkaia. Actividad de predominio masculino y con importante presencia de trabajadores de más de 45 años, presenta una tasa de movilidad ligeramente por debajo de la media. Las ocupaciones que han protagonizado los desplazamientos han sido las de Conductores asalariados de camiones, peones del transporte de mercancías y descargadores, conductores de autobuses y tranvías y Conductores asalariados de automóviles,taxis y furgonetas.

Los principales flujos con un peso de extranjeros por encima del noventa por ciento se concentraron, durante el año pasado, de Almería a Huelva.

Los flujos entre las provincias de Alicante, Murcia, Almería, Albacete y Valencia se caracterizan por ser contrataciones a hombres extranjeros de fuera de la Unión Europea y en actividades agrícolas.