Ana Belén Martín: la almeriense que pone el acento político a Informativos Telecinco

ES el primer día de calor en Madrid desde hace meses. En las inmediaciones de Telecinco, las terrazas de los bares de siempre anuncian la llegada del verano. Es la hora de comer, el informativo ha arrancado y Ana Belén tiene unas horas antes de preparar los temas para el telediario de las nueve.

No tiene más de treinta años y lleva casi nueve en Telecinco, trabajando en una de las piedras angulares del informativo, en la sección de Nacional. "Ahora mismo estoy donde quiero estar. Llevo Interior y Justicia y tengo la oportunidad de hacer cosas muy interesantes y divertidas también". Siempre ha tenido claro a qué quería dedicarse, "el periodismo hay que llevarlo en la sangre", así se lo explica a los jóvenes que quieren estudiar esta carrera. Cuando todavía andaba entre libros y apuntes en la Compañía de María, tuvo la oportunidad de escribir en un periódico almeriense durante unos meses. Fue la primera vez que Ana Belén Martín firmaría como periodista.

"En los primeros años de carrera hice prácticas en la Cadena Ser de Almería. Allí aprendí muchísimo… trabajaba de lunes a domingo; tenía que preparar la información para casi todos los programas del día y entraba en los boletines con Asun". En la radio demostró que esa vocación que encontró siendo niña no estaba equivocaba. De ojos todavía hoy curiosos, Ana Belén desarrolló durante aquellos años un olfato de periodista de raza y un bagaje político municipal, que se convirtieron en la llave que le abriría la puerta principal de su futuro. "Siempre pensé que acabaría trabajando en la radio. Pero cuando me hicieron la entrevista para entrar de becaria en Telecinco tuve que decir que sí". Seguía en las aulas de la Complutense y quería seguir también experimentando la profesión antes de lanzarse al mundo con el título en la mano. La bolsa de trabajo de la Universidad dio resultado. Onda Cero, Televisión Española… todos parecían interesados en la joven periodista almeriense. Pero fue el, por aquel entonces, subdirector de Informativos Telecinco, Juan Pedro Valentín, el que consiguió despertar su entusiasmo en una entrevista que duraría más de una hora. Almería también tuvo cabida en aquella conversación.

Fue un verano en el que se puso a prueba tanto su talento como su capacidad de enfrentarse a encargos casi imposibles. "Fue el año en el que se pedía la extradición de Pinochet y me dijeron que tenía que localizar a uno de los abogados. Claro, en ningún momento se plantearon que la becaria pudiera conseguir algo así. Pero localicé a uno de ellos. Además fue muy gracioso porque aquel abogado decía que le recordaba a su nieta… Desde entonces, nos concedía entrevistas cada vez que yo se lo pedía". Ana Belén habla de suerte cuando recuerda aquellas historias que le abrieron un hueco en uno de los informativos nacionales con tan sólo veintitrés años. Pero la suerte sólo da la oportunidad, el aprovecharla depende de cada uno.

Acostumbrarse a la noche, a los horarios cambiados y a comer cuando tendría que estar desayunando… fue, quizás, lo más duro en sus primeros años en la cadena de Fuencarral (Telecinco). "Los dos primeros años estuve en el turno de noche: de doce a siete de la mañana y otros dos años entrando a las cinco de la mañana y saliendo a la una de la tarde. El cuerpo pasa factura y luego, tardas en regular el organismo y adaptarte a una vida normal".

Juan Pedro fue, quizás, quien reconoció en ella las aptitudes para dedicarse al complejo y, para tantos, sobrio mundo de la política. Ella quería cultura. "Cuando tenía que cubrir los conciertos o los actos culturales que se hacían en Almería… eran noticias mucho más agradecidas de cara a la gente que un pleno municipal. Y supongo que por eso pensé que cultura sería la sección que más encajaba conmigo en ese momento". Pero en eso sí se equivocó porque tras nueve años dedicados a Nacional ha dado como profesional grandes crónicas políticas.