Apagón a las prostitutas

A oscuras se ha quedado el grupo de prostitutas que habitualmente ejercen en la rotonda del túnel de Bayyana. En este punto de la antigua carretera de El Cañarete las farolas han dejado de prestar su luz y permanecen desde principios de semana fuera de los servicios del Ayuntamiento de Almería, ocultando a la vista rápida de los conductores las provocaciones de las mujeres que ofrecen, con apenas ropa, sexo a cambio de dinero.

Todavía no ha llegado a Pleno para su aprobación definitiva la Ordenanza Cívica que penaliza la prostitución callejera, pero parece que el Ayuntamiento de la capital ha querido tomar cartas en el extremado exhibicionismo que ha alcanzado este verano el ejercicio de la prostitución, objeto de protestas de colectivos sociales y vecinos de Pescadería, con el sutil apagón de farolas.

Fruto de una avería -que se prolonga ya una semana- o de una medida intencionada, lo cierto es que la presencia de las prostitutas en el Bayyana es menos perceptible. La ausencia de alumbrado público oculta la práctica de sexo en plena carretera, donde ya forma parte del paisaje urbano las escenas tras los coches de los clientes.

La única luz que le sirve a este grupo de prostitutas, jóvenes en su mayoría de procedencia rumana y rusa, es la que les presta la gasolinera del Bayyana y los propios faros de los vehículos que transitan por esta entrada principal a la capital desde el Poniente.

Aunque el exhibicionismo de cuerpos subidos a tacones, cubiertos en muchas ocasiones sólo con tangas mínimos, es casi imperceptible, no se ha hecho del todo invisible. Las mujeres continúan asomando piernas y traseros a la carretera, provocando a veces situaciones de riesgo para la seguridad vial. Durante el día, la prostitución sigue ejerciéndose en este punto, si bien desde comienzos del mes de septiembre no hay tanto consumo sexual como el grado alcanzado durante este verano. Sobre todo en el mes de agosto.

A finales de este mes, y en plena celebración de la Feria en honor a la Virgen del Mar, el alcalde de Almería, Luis Rogelio Rodríguez-Comendador, hizo pública su intención de retomar de forma inmediata la Ordenanza Cívica, que dejó el ex concejal de Seguridad Ciudadana, José Carlos Dopico, preparada para su aprobación plenaria y entrada en vigor.

El equipo de Gobierno, no obstante, aún no se ha sentado con los grupos de la oposición para limar el contenido de algunos artículos relativos a la prostitución callejera conflictivos, que hicieron al alcalde retirar del orden del día plenario la nueva ordenanza en aras de alcanzar un consenso.