En torno a una decena de chabolas ubicadas en el poblado de infraviviendas de Walili en Níjar (Almería) han ardido por causas que aún se desconocen sin que se hayan producido daños personales si bien varias familias de escasos recursos han perdido parte de sus posesiones y una estancia.
Fuentes del servicio unificado de emergencias 112 Andalucía y de los Bomberos de Almería han explicado a Europa Press que los hechos tuvieron lugar sobre las 14,10 horas del pasado lunes cuando recibieron varias llamadas en las que se alertaba de que una chabola hecha con plástico se encontraba ardiendo cerca del paraje de los Cazadores.
Así, se dio aviso a miembros del 061, Guardia Civil, Policía Local de Níjar y Bomberos de Almería, quienes accedieron hasta el lugar de las llamas a través de la carretera Barranquete-San José para sofocar las llamas, que provocaron una intensa columna de humo negro, mientras que algunas personas trataban de recuperar algunos enseres.
En total se desplazaron hasta el lugar tres vehículos con seis bomberos que se extinguieron las llamas y finalizaron su actuación cerca de las 16,50 horas. Por el momento se desconoce las causas del incendio así como los recursos que han podido ofrecerse a los afectados.
"Volvemos a lamentar las consecuencias de la situación de chabolismo en nuestro municipio. Un nuevo incendio arrasa con multitud de construcciones donde malviven vecinos de nuestro municipio, trabajadores de nuestros invernaderos", han manifestado desde Adelante Níjar en sus redes sociales.
"Muchos de ellos han perdido lo poco que tenían. Nos llena de rabia y tristeza ver que estas situaciones siguen sucediendo y no se ha puesto aún remedio a este tremendo problema. Con la esperanza de que la situación empiece a revertirse ya, exigimos a todas las administraciones que lleven a cabo un Plan Integral de Erradicación de Asentamientos con Alternativa Habitacional", han añadido desde este partido.
Los asentamientos chabolistas enclavados en el mar de plástico de la comarca de Níjar sufrieron cinco incendios en menos de un año. Entre diciembre de 2020 y octubre de 2021 fueron pasto de las llamas las infraviviendas de plásticos y palés de madera hasta en cinco ocasiones en las que el fuego arrasó los poblados de los trabajadores de los invernaderos de Walili, Don Domingo en Las Casillas en Atochares y La Paula en El Viso. Siniestros que dejaron sin techo a cientos de personas, alguna que otra atendida por las heridas, quemaduras de distinto grado e inhalación de gases, pero afortunadamente sin fallecidos.
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