Prevenir la exclusión social de las familias y proporcionar la adecuada atención a las necesidades básicas de alimentación de los menores es el objetivo de las Ayudas Económicas que firmó ayer los responsables de la Junta de Andalucía con los alcaldes de los ayuntamientos de más de 20.000 habitantes, así como la Diputación Provincial de Almería.

Para la provincia de Almería se destinarán más de 320.000 euros en Ayudas Económicas Familiares, de los que 112.833 se transferirán a la Diputación Provincial, 93.750 al Ayuntamiento de Almería, 11.200 al de Adra, 38.797 al de El Ejido, 13.009 al de Níjar, 40.022 al de Roquetas de Mar y 11.159 al de Vícar.

Estos acuerdos están enmarcados dentro del Decreto de mediadas extraordinarias y urgentes para la lucha contra la exclusión social. El acto de la firma del acuerdo lo presentó Alfredo Valdivia, delegado de Bienestar Social, quien destacó "la apuesta por el Gobierno Andaluz por la atención de los colectivos más vulnerables, como las familias con especiales necesidades y la población infantil en situación de riesgo".

Valdivia explicó que el año pasado "se beneficiaron de estas ayudas un total de 791 familias y más de 1.700 menores. Con la ampliación de las medidas extraordinarias en Andalucía, se prevé que más de 1.700 hogares y cerca de 4.000 menores puedan tener acceso a las mismas".

El delegado de Bienestar Social enumeró los requisitos de las personas destinatarias de estas ayudas (padres, madres o tutores legales de los menores): "Presencia de indicadores de riesgo para el menor en la dinámica familiar, existencia de necesidades básicas del menor que deban ser cubiertas, falta de recursos económicos en el hogar donde el menor resida o se reintegre, existencia de un programa previo de intervención familiar, pronóstico positivo sobre la resolución de la problemática detectadas, y aceptación por parte de los destinatarios de la intervención de los Servicios Sociales Comunitarios, comprometiéndose a cumplir los objetivos establecidos en el programa de intervención".

Además de la carencia de recursos económicos, el perfil familiar se caracteriza por dificultades para cubrir las necesidades básicas, así como la existencia de desajustes en la convivencia, que revelan factores de riesgo que previamente han sido diagnosticados por los Servicios Sociales. Estas familias presentas escasos apoyos familiares y sociales, falta de habilidades parentales, desempleo de larga duración o inestabilidad laboral, vivienda con déficit... Las ayudas son prestaciones temporales de carácter preventivo, que se conceden a familias para la atención de las necesidades básicas de menores a su cargo cuando carecen de recursos económicos. "Su objetivo es prevenir, reducir o suprimir los factores que generan situaciones de dificultad social", señaló Valdivia.

El delegado de Bienestar Social, Alfredo Valdivia, aseguró que para estas ayudas "se están agilizando los trámites para que se hagan las transferencias lo antes posible".