Berenjena, calabacín, pepino y tomate, los 'cuatro fantásticos'

El tomate ha firmado una buena campaña este año. / Rafael González

Días de mucho, vísperas de nada. El sabio refranero español se anticipa a lo que puede ser la próxima campaña hortofrutícola almeriense, tras registrar en el año en curso unas cifras históricas, las mejores de la última década, con un valor de la producción en origen de 2.403 millones de euros, un 19% más; cifra que asciende a 3.154 millones de euros, un 19% de incremento, en destino; con un precio medio percibido por el agricultor de 0,664 euros el kilo, un 22,5% más que el año pasado (12 céntimos más por kilo) y el máximo de la serie histórica.

Los agricultores almerienses ya preparan el inicio de la campaña 2017-2018, con la siembra de cultivos tempranos desde hace días, mientras saborean los buenos datos cosechados este año, en el que los cultivos que han tirado del carro en cuanto al mejor comportamiento de los ingresos en origen han sido la berenjena, que ha visto crecer su valor en un 93%, el calabacín, con un 56% más, el pepino (50%) y el tomate (25%). Por el contrario, la cruz de la moneda la presentan los cultivos de primavera-verano, el melón, que ha registrado un descenso en su valor de producción del 29%, y la sandía, con una caída del 16%.

22,5%Auge. Del precio medio percibido por el agricultor (0,664 euros/kilo), el máximo de la serie histórica

Por otro lado, mantienen el nivel, con ligeros aumentos, la judía verde, con un 3,7% más de ingresos, la lechuga, con un aumento del 3,5%, y el pimiento, con un 1%.

El buen o mal comportamiento de algunos cultivos no se debe, precisamente, a su incremento o reducción en la superficie. El pimiento es el que más ha crecido, con 819 hectáreas en comparación con el año pasado, mientras sólo ha visto aumentar su valor un 1%; la sandía ha incrementado sus hectáreas en 350, pero sus ingresos han caído un 16%; la berenjena ha reducido su superficie en 150 hectáreas y ha mejorado sus ingresos un 93%; y el tomate ha reducido su área de cultivo en 720 hectáreas, el producto con más descenso de superficie, mientras que el valor de su producción ha subido un 25%. La clave que explica estos vaivenes no es otra que el precio medio de cada producto.

La berenjena, quinta hortaliza en importancia en cuanto al valor de la producción en la provincia, lidera el ranking de incremento de ingresos, con el 93%, hasta facturar en origen un total de 133 millones de euros, a pesar de que su producción ha caído un 8,7%, hasta las 168.046 toneladas. La berenjena ha visto cómo su precio medio se ha duplicado en el último año, al pasar de los 0,37 a los 0,79 euros el kilo de la cosecha 2016-2017, el más elevado de la serie histórica.

En cuarto lugar por su valor total se sitúa el calabacín, que sin embargo es la segunda hortaliza que ha registrado un mejor comportamiento en ingresos, tras la berenjena. En su caso sí existe una correlación entre aumento de producción y facturación, aunque la clave ha estado en el precio medio, que ha pasado de 0,49 a 0,74 euros el kilo. Con 448.975 toneladas, un 3,4% más, el calabacín ha arrojado unos ingresos en origen de 332 millones de euros (+56%).

El pepino, tercero en el ranking de aumento de ingresos, rozando el 51%, arroja un total de 277 millones de euros, situándose en tercer lugar, también, en volumen de facturación total, tras el tomate y el pimiento. La cotización media ha crecido un 56% al pasar de 0,42 a 0,66 euros el kilo, con un volumen de 422.214 toneladas, un 3,8% menos.

El tomate, buque insignia de la huerta almeriense por facturación, ha aumentado su valor un 25% hasta alcanzar los 730 millones de euros. El precio medio ha pasado de 0,53 a 0,72 euros el kilo (+37%), pero la producción ha descendido un 8%, hasta las 1.008.867 toneladas.

El melón ha registrado un año nefasto, convirtiéndose en la 'cenicienta' de la campaña hortofrutícola almeriense 2016-2017. Con un precio medio de 0,34 euros por kilo, un 27% menos que el año anterior, ha visto caer el valor de la producción un 29%, hasta los 31 millones de euros. La reducción de superficie en un 10% ha evitado males mayores, con este nivel de cotizaciones, arrojando un volumen de 93.527 toneladas (-3%).

La sandía no levanta cabeza desde la cosecha 2014-2015. Desde entonces, la cotización media no ha parado de caer. Su superficie ha crecido un 4%, lo que ha motivado un aumento de producción, hasta las 558.223 toneladas (+4,8%), pero el valor en origen ha caído un 16,2%, hasta los 141 millones de euros.

La lechuga mantiene superficie, cae en volumen y mejora su valor

La lechuga, que se cultiva principalmente en el levante y en algunas zonas del interior de la provincia, prácticamente ha mantenido su superficie, con un ligero descenso, de 72 hectáreas, así como en el rendimiento (-0,5%), lo que ha provovado un menor volumen de kilos, con una caída del 1,5%, hasta las 158.298 toneladas. Sin embargo, el incremento del precio medio en un 5% ha aumentado el valor de la producción respecto a la campaña pasada en un 3,5%, hasta situarse en 132 millones de euros. La cotización media de la lechuga registra el segundo año consecutivo de alzas, al pasar de 0,6 euros en la campaña 2014-2015 a los 0,8 de la 2015-2016 y los 0,84 de esta última campaña. La provincia cultiva más de 7.000 hectáreas de lechuga, consolidándose como la segunda provincia de España en volumen de producción y valor comercializado al exterior, aunque aún se encuentra lejos del líder, su vecina Murcia. Según las últimas cifras, España exportó un total de 743.130 toneladas de lechuga en 2016, la mayoría, correspondientes a la Región de Murcia, con 527.423 toneladas, el 71% del total, seguida de Almería, que envió al exterior 142.894 toneladas, el 19%. Entre ambas provincias acaparan el 90% de la exportación española de lechuga. De ahí el interés que tendrán puesto en 'Lettuce Attraction', la conferencia sobre lechuga que acogerá este año Fruit Attraction.