El juez Calatayud da una lección magistral para educar a los hijos

En el teatro municipal 'Rafael Alberti' se dieron cita cientos de vecinos, entre ellos jóvenes, para escuchar la ponencia

El alcalde y la concejala de Universidad recibieron al juez Calatayud.
El alcalde y la concejala de Universidad recibieron al juez Calatayud.
Patricia López Rojas / H-Overa

22 de septiembre 2010 - 05:01

El Teatro Municipal Rafael Alberti de Huércal-Overa presentó ayer un lleno total para la conferencia del magistrado del Juzgado número 1 de Menores de Granada, Emilio Calatayud, que dio una magistral lección sobre la educación de los hijos, en una conferencia bajo el título Los jóvenes de hoy, ¿Hijos o Colegas?.

Así los asistentes, entre los que se encontraban personas de todas las edades, entre ellos jóvenes, siguieron muy atentos cómo en muy pocos años, en tres o cuatro décadas, España ha pasado de ser un país preconstitucional a convertirse en un Estado democrático de Derecho. Así "hemos evolucionado mucho en muy poco tiempo. La traducción en el ámbito de la educación de esa gigantesca transformación es el siguiente: hemos pasado del padre autoritario, del padre preconstitucional, a la corriente psicológica según la cual hay que dialogar, hay que argumentar y hay que razonar con nuestros hijos. Y como en España, no tenemos término medio, hemos dejado atrás a los padres autoritarios y nos hemos convertido en colegas de nuestros hijos . De un extremo, al opuesto. Y no somos colegas de nuestros hijos. Somos sus padres y punto", señalaba el magistrado durante su ponencia.

Y es que eso es algo que a muchos de los padres se les olvida intentando ser uno más de los amigos de sus hijos, pero en el núcleo familiar también tienen que haber unas normas y unas reglas.

Debido también al cambio que hemos experimentado, "nuestros menores conocen y ejercen todos sus derechos, que no son pocos. Pero no saben nada de deberes. Y los tienen. El Código Civil dice que los hijos deben obedecer a sus padres mientras permanezcan bajo su potestad y respetarles siempre. Y agrega que "han de contribuir equitativamente, según sus posibilidades, al levantamiento de las cargas de la familia mientras convivan con ella. Luego tienen sus derechos, sí, pero también sus deberes. Y debe saberse".

Los asistentes siguieron exhaustos las palabras de este reconocido magistrado del que han trascendido muchas de sus sentencias en las que priman los servicios a la comunidad o las tareas educativas en lugar de las penas de internamiento, siendo una importante referencia en el campo de la judicatura a nivel nacional e internacional.

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