Campaña para limpiar semáforos y farolas de anuncios publicitarios

Servicios Urbanos veta la pega de carteles en el mobiliario urbano. Los sustituye por mensajes en los que recuerda que este tipo de propaganda está prohibida

Dos operarios 'asean'  un semáforo de anuncios publicitarios.
Dos operarios 'asean' un semáforo de anuncios publicitarios.
Redacción / Almería

12 de noviembre 2008 - 01:00

El Ayuntamiento de Almería, a través de la Concejalía de Servicios Urbanos, ha iniciado una campaña de limpieza de farolas en la ciudad para la retirada de carteles publicitarios adheridos. Varios operarios han comenzado los trabajos en la avenida Pablo Iglesias y Paseo de Almería, donde están limpiando y retirando todo tipo de publicidad de los postes, semáforos y farolas, para velar por el óptimo mantenimiento del mobiliario urbano y evitar que se deteriore, sustituyendo los mensajes por otros en los que se insta a la colaboración ciudadana en la conservación de la ciudad.

Los responsables municipales pretenden concienciar a la ciudadanía de la importancia de mantener el mobiliario urbano en buenas condiciones, lo que incluye la prohibición de fijar elementos publicitarios. En este sentido, los diferentes carteles anunciadores adheridos a los postes están siendo sustituidos por carteles en los que se insta al ciudadano al cuidado del mobiliario.

Los carteles recogen literalmente el siguiente texto: 'Prohibido fijar carteles o propaganda publicitaria de cualquier tipo sin la expresa autorización municipal. El Ayuntamiento procederá contra el responsable en caso de incumplimiento conforme establece la legislación vigente'.

Además de las mencionadas calles, la limpieza de farolas se llevará a cabo en otras zonas de la ciudad, como la avenida Cabo de Gata, la avenida de la Estación o el Paseo de la Caridad. Los técnicos municipales aseguran que la práctica de pegar carteles no autorizados al mobiliario urbano repercute de forma negativa en la conservación de estos bienes, que se ven afectados al deteriorarse la pintura que los recubre, además de la sensación de suciedad que ofrecen y que perjudica a la imagen de la ciudad.

En los últimos años la práctica de la pegada de carteles ha proliferado, sobre todo, de anuncios de particulares ofreciendo alquileres de pisos o personal para la limpieza del hogar y cuidado de niños y personas de la tercera edad.

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