El Caso Almería no se olvida

Confundidos como terroristas de ETA tras el asesinato del Coronel Valenzuela, el 10 de mayo de 1981, un santanderino, un salmantino y un almeriense de Pechina, Juan Mañas, fueron asesinados por varios agentes de la Guardia Civil después de haber sido torturados en busca de una confesión imposible, pues su delito no era ninguno. Ni etarras ni asesinos. Los agentes, tras percatarse de su error, mataron a tiros y calcinaron los cuerpos en un Ford Fiesta (en el kilómetro 8,400 de la carretera de Gérgal) para eliminar pruebas y cambiar la versión de los hechos. La Benemérita dijo que iban armados e indocumentados mientras se les transportaba a Madrid e intentaron huir. Pero quien conoce el caso sabe que eso no sucedió. Defienden que ya estaban muertos y que habían sido tiroteados en el antiguo cuartel de Casas Fuertes. A los tres acusados se les sentenció de homicidas y no por asesinato.

Treinta y tres años después, la familia de Juan Mañas sigue pidiendo justicia, argumentan que no todos los culpables de aquella tragedia fueron juzgados -los llamados voluntarios del teniente coronel Carlos Castillo Quero-.

Pero en mitad de su lucha, les ha llegado una buena noticia, Juan Mañas será recordado para siempre en su municipio, un parque recibirá su nombre y se le dedicará una placa o un busto. Su recuerdo será inmortal a pesar de la corta duración de su vida, pues fue asesinado cuando ni había llegado a la edad de 25 años.

La iniciativa se produce a raíz de una moción presentada por el PSOE con respaldo unánime del GIP, el PA y el PP. El recuerdo toma forma a la tercera, pues, anteriormente, ya se intentó recordar de alguna forma a Mañas, la última vez en 2009, con una propuesta del PP que fue rechazada. Pero, al fin y al cabo, antes o después, lo importante es que todos los grupos se han puesto de acuerdo y la familia valora de forma muy positiva el hecho. "Recibimos la noticia con mucha emoción, porque después de 33 años se ha llegado a un acuerdo de todas las partes. Nuestro hermano se lo merece", explica Francisco Javier Mañas, su hermano pequeño, aquel que iba a hacer la comunión para la que Juan Mañas había viajado desde Santander, lugar donde trabajaba, invitando a sus dos amigos. Pero nunca asistió a la celebración, la tarde de antes habían sido detenidos en Roquetas: "Hay que imaginarse esa comunión, fue horrible sin saber dónde estaba mi hermano. Recuerdo que cambié la petición que se suele realizar. Tenía escrito que deseaba el aumento de los sacerdotes para difundir la religión y lo que dije fue que quería que apareciera mi hermano. El cura, que no lo sabía, me miró extrañado", explica Francisco, que entonces tenía 9 años.

Francisco Álvarez es en la actualidad el primer teniente de alcalde del Ayuntamiento Pechina en la actualidad por el GIP y una de las personas que más ayudó a la familia Mañas a rehacerse de la tragedia: "Creemos importante que la figura de Juan sea recordada para siempre porque fue un crimen que no debe repetirse. Celebraremos un acto con el consenso de todos los grupos políticos y de la familia". El mismo sentimiento expresa la alcaldesa, María de los Ángeles Morales: "Pechina recordará a un vecino que murió a manos de otros sin motivo alguno. Una historia que hizo mucho daño a nuestro municipio, a su familia y a los vecinos".

Aún no está claro cuál será el objeto material en el que se recordará a este almeriense asesinado a inicios de los ochenta. Es muy posible que en el acto se incluya la reproducción de la película El Caso Almería, dirigida por Pedro Sánchez y que vio la luz dos años después de los acontecimientos. De esta forma, los jóvenes que no conozcan la historia, conocerán y recapacitarán sobre lo sucedido. Queda también por ver si el objeto material será mediante una placa o un busto, es algo que se decidirá entre la corporación municipal y la familia.