Coches, salud, música y refranes llenan los bancos de la capital

"La política para los políticos, las mujeres a ratos y el vino a todas horas", habla Francisco Hidalgo, quien asegura que la política no es de los asuntos que más le interesan "la gente piensa que solemos hablar de eso, pero no es así". Muchas de sus mañanas Francisco se lanza a la calle, y camina hacía el Paseo de Almería acompañado de sus amigotes. Normalmente suelen elegir unos bancos situados bajo los árboles "así hace más fresquito" . Ese es el lugar seleccionado por ellos para pasar un rato agradable mientras dialogan de los temas que más le interesan. Coches, seguridad social, música y algunos refranes, son las cuestiones que más se pueden escuchar en sus charlas.

Emilia Carbonero, es otra de las muchas personas que se reúne a diario con sus amigas. A sus setenta y siete años, cuando el reloj marca las 9:00, Emilia comienza a arreglarse y pronto emprende el camino hacia La Rambla de Almería acompañada de todas sus amigas.

Por estas fechas Emilia se ha encontrado con unos nuevos acompañantes, Antonio Navarro, de setenta y nueve años, y María Navarro, de ochenta y siete. Se trata de dos hermanos nacidos en Alicún, pero que en la actualidad residen en Castellón. María y Antonio están pasando unos días de vacaciones por la ciudad, y muchas de las mañanas se reúnen con Emilia " amiga desde hace ya muchos años y nos encanta matar las horas con ella". Desde hace días Antonio le comenta a todos los demás que Almería ha empeorado bastante desde la última vez que la visitó "está entera levantada y nos podemos caer".

Un banco cerca del colegio La Salle es el lugar acordado para acomodarse y pasar el tiempo. Durante toda la mañana hablan de los temas más variopintos. Sus charlas pueden abarcar desde los temas más banales y diarios, el calor, propio de las fechas estivales, la comida que preparan para su familia etc, hasta entrar en las materias más insospechadas, ya que señala que "a veces hablamos hasta de Victoria Beckham". Cuando la tarde asoma, acometen el trayecto hacia El Paseo, esta vez el lugar seleccionado son unos asientos ubicados cerca de Correos. Es allí donde conversan durante algunas horas "también nos entretenemos viendo a los mimos que pasan de vez en cuando".

La tardanza de los autobuses y la mala combinación de éstos, es lo más relevante y comentado por Francisca Rodríguez con sus amigas y familiares. Francisca, a sus ochenta y dos años, ya no puede conducir y apostilla que al vivir en Roquetas de Mar, el transporte público es su única solución para poder trasladarse. Juan López, su marido, señala que " el correo suele tardar demasiado y siempre llegamos tarde a los sitios".