Almería

Los Coloraos, de Gibraltar a Almería

  • Contrabando. Los del Resguardo almerienses en agosto de 1824 encontraron en la playa de San Miguel un importante alijo de mercancías y pudieron hacerse con la mitad de las cargas

Los Coloraos, de Gibraltar a Almería

Los Coloraos, de Gibraltar a Almería

En época en la que la Masonería se estableció en España, primeramente por el Conde de Aranda, sucedido por el granadino Conde de Montijo, proliferaron sus logias, surgiendo posteriormente los Comuneros, menos elitistas que los masones, que organizan a sus miembros mediante torres, para limitar las informaciones entre sus seguidores en caso de ser descubiertos. Intentan unirse ambas ramas conspiratorias en la Sociedad del Anillo, no siendo posible su éxito. Los Comuneros eran partidarios de las libertades españolas, como en 1521 Padilla Bravo y Maldonado se enfrentaban a los abusos imperiales de Carlos V. En este espíritu de conspiración y descontento en Gibraltar fundan la Santa Hermandad, organizados en Círculos, para limitar sus secretos y en casos de ser apresados por absolutistas, tener pocas informaciones, Beltrán de Lis, fue comunero y estaba con ellos, Septien, Salvador Martínez de Algeciras, los González, cómicos y militares malagueños, que perdieron la vida en Almería, aunque en la obra del cronista malagueño Narciso Díaz Escobar "Anales malagueños", 1898, no recoge a ninguno de los González, que ante la muerte en Agosto de 1824 por ser apresados con los Coloraos y después de declarar, manifestaron ser de Málaga. En Málaga en Julio de 1824 aprisionaron a revolucionarios y hubo tres fusilamientos. Los indultos reales del 1 de Mayo de 1824 dejaban a muchísimos liberales como impurificados, bajo peligro de persecución, presidio o muerte.

La situación era de descontento entre la población, contraria a la nueva recluta de 36.000 hombre anunciada por los absolutistas -la situación era difícil, con ataque liberales y Guerras en las Américas-. Se ordena a los jueces que no entreguen pasaportes para evitar la fuga de ciudadanos. En Agosto de 1824 se dieron Reales Órdenes de Fernando VII contra Masones y Comuneros. Pero las expediciones desde Gibraltar contra Tarifa y Almería estaban en marcha.

El 7 de agosto, el bergantín inglés de Bassadone marcha hacia Levante

En Almería los liberales encontraron unos importantes aliados, los contrabandistas. Los del Resguardo, policía de costas, encontraron 70 cargas de contrabando en fechas anteriores al desembarco liberal (Gaceta de Madrid 9-Septiembre-1824).Los del Resguardo almerienses en fechas de primeros de Agosto de 1824 encontraron en la playa de San Miguel un importante alijo de mercancías de contrabando, los del Resguardo pudieron hacerse con la mitad de las cargas, unas 180 que contenían algodón, lencería y tabaco, se calculaba entonces que los del contrabando por la paya de San Miguel consiguieron introducir unas 400 cargas en playas cercanas a Almería. Consiguieron los fernandinos hacer algunos prisioneros, pudieron saber que se preparaba la llegada de nuevos alijos con armas, municiones, uniformes (Gaceta de Madrid 31-Agosto-1824), los empleados del Resguardo, actuaron con eficacia, las autoridades realistas de Almería comenzaron a organizar la defensa de la ciudad, sabían que los revolucionarios de Gibraltar contarían con la cooperación de los contrabandistas, deseosos de recuperar las mercancías perdidas, estando muy bien organizada la partida del contrabandista El Chato.

En la Almería del Trienio hubo organizaciones de los Comuneros, al menos dos organizaciones, que mantuvieron correspondencia con los comuneros de Valdepeñas, dirigidos por Chaleco, enemigo de Fernando VII, contrario a la intervención absolutista francesa desde 1823. Una torre de Almería dependía de Málaga, pero nombraban a su Alcaide y al Secretario por iniciales, mantenían secretismo en sus comunicaciones.

Los informes de Cesar Conti y de Regato, sobre esta etapa, en muchas cuestiones han de tratarse con cuidado, pues fueron exaltados revolucionarios hasta fechas cercanas a 1824, Conti emigra a Gibraltar y después en Londres es confidente del Embajador realista de España.

No era de mucha confianza a los realistas de Almería su Subdelegado de Policía, Manuel Cea Bermúdez, por su pasado liberal, pero al ser nombrado Ministro de Estado su hermano Francisco Cea Bermúdez, julio 1824, logra mantenerse en el puesto.

Regato, médico, periodista, conspirador, pasa de extremado liberal, hasta ser informador personal de Fernando VII en 1824, siendo agente personal del Rey entre 1828 a 1831, posteriormente, 1835, sería desterrado a Filipinas por carlista. Regato estaba en Cádiz en fecha de las expediciones de Valdés y Pablo Iglesias, informando a Fernando VII.

Primeramente se comunica que manifestó el Capitán del Puerto de Gibraltar que en el Corsario Heroína solamente embarcaron de 12 a 20 borrachos, poco después se considera que saldría la barca de Gandolino hacia Marvella, pero el Capitán del puerto Gibraltareño seguía sin oponerse ante los hechos contrarios a España, mas realmente el 3 de Agosto habían salido tres faluchos al mando de Valdés contra Algeciras, pero por no poder atravesar Punta Europa marchan contra Tarifa, que la retienen hasta el 19 de Agosto, consiguen liberar a los presos y hacerse con la ayuda de unos 400 hombres, pero pronto son cercados por tropas francesas que ocupaban Cádiz, aliadas de Fernando VII y por ejército del General José O'Donell, con mando en Algeciras. Francisco Valdés escaparía a Tánger con decenas de hombres por la noche, y con unos 14.000 duros, en un falucho, pero el resto de resistentes mandados por el Oficial don Pedro Valdés deben rendirse, muchos serían fusilados. Antonio Marconchini , intenta ayudar a Valdés tomando Marbella, no pudo desembarcar en Estepona, consigue unas pocas cantidades de dinero y vuelve a Gibraltar (legajo Estado 5625 AHN).

El 7 de agosto el bergantín inglés de Bassadone, desde Gibraltar marcha hacia Levante con armas y revolucionarios, preguntado el capitán del puerto de Gibraltar afirma que presenció hacerse a la vela al buque y no llevaba armas ni evolucionarios, además de que tales denuncias deben hacerse con testigos, de los que carece el cónsul español. Algunos patronos ayudaron a los revolucionarios, así Antonio Bru en su barcaza, la Virgen Buena Guía, llevó a 65 revolucionarios de los que tomaron Tarifa, y posteriormente fue acompañando con su barcaza al barco, El Trinidad de Alicante, de Bartolomé Arqués, alicantino y estuvieron en la expedición de Iglesias que en el Bergantín Fontana llegó a costas de Almería. Este Bergantín pertenecía a Nicolás Bassadone, el Fontana de Gibraltar, lo mandaba el italiano Agustín Caradone, alias Borbón. Contó con 48 hombres, entre ellos el capellán catalán Boiques, Antonio Cros de Málaga, Antonio Santos que conocía Almería y muchos otros. Los Bassadone son una familia de origen italiano, de Genova, establecidos desde 1748 en Gibraltar, en la actualidad este apellido lo llevan importantes familias de la industria gibraltareña. En numerosos documentos en el archivo del Ministerio de Justicia en la causa seguida contra Iglesias y Santos, denominan al bergantín Gibraltareño Federico.

También acompaña en la expedición contra Almería el barco del valenciano Juan Bautista Cubells, alias Borrasca, persona muy conocida por su actividad en el contrabando.

Monumento a los Comuneros en Villalar.

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