Comida de confraternidad para compartir las celebraciones
El 'Cuarto Encuentro de Tijoleños' se materializa con el almuerzo colectivo en el que participaron más de 300 personas. Un centenar de emigrantes a Cataluña vuelven a su pueblo en fiestas
Desde el año 2004 se sucede ininterrumpidamente el Encuentro Cultural de Tíjoleños. El inicio de este proyecto partía hace cuatro años de la Asociación Cultural de este municipio. Entre sus promotores, y por destacar algunos de ellos; Carolina Jiménez, Dolores, Remedios y José Antonio Carreño, María y Antonio Oller, María Teresa Domínguez o Jesús Ortigosa, son los nombres tal vez más representativos de un grupo muy numeroso de vecinos de este pueblo que quisieron reunir a los nacidos en Tíjola y que algún día se vieron obligados a emigrar por distintas circunstancias de la vida, pero cuyas raíces continúan permaneciendo en su localidad natal. Precisamente porque la mayoría de ellos, han tenido dificultades para poder reencontrarse con su pasado en décadas, el encuentro personal se hacía aún más necesario, y el primero de ellos se celebró en Tarrasa, cuando un centenar de vecinos de Tíjola, con su alcalde, José Francisco Carreño a la cabeza, decidieron montarse en un autobús y compartir un fin de semana con sus paisanos en esta provincia barcelonesa.
Los encuentros, que se han ido sucediendo año tras año desde entonces, consisten en una reunión de personas de Tíjola con sus familiares y amigos. Durante dos días, se realizan manifestaciones culturales de Andalucía y Cataluña, y comparten distintas visitas y actos además de una comida de confraternización.
Coincidiendo con las Fiestas de la Virgen del Socorro, el pasado viernes arribaban a esta localidad del alto almanzora, dos autobuses de tijoleños catalanes, con la intención de celebrar el Cuarto Encuentro de Tijoleños. Lo hacían dispuestos a compartir con sus paisanos las tradiciones culturales y festivas que estos días celebra su pueblo con motivo de las fiestas en honor a la Virgen del Socorro. Fruto de estos encuentros, en estos días se han vivido momentos muy emotivos, reencuentros de personas que llevaban más de treinta años sin verse, pero que a pesar del transcurrir del tiempo, han sido capaces de repasar como si fuera ayer, momentos del pasado. Como si se tratara de un tour por los olores del recuerdo, unos y otros, han tenido oportunidad de visitar aquellos sitios que tienen que ver con un pasado y un presente, y tal vez, uno de los cordones umbilicales de esta especie de hermandad. Los secaderos de jamón en el municipio vecino de Serón, la balsa de Cela, el pueblo de Bacares, el mercadillo de su pueblo, han formado parte del recorrido, para rematar la faena esta noche, donde volverán a vivir la procesión de su patrona, desde la Ermita a la Iglesia de Santa María.
Las relaciones entre los alcaldes y corporaciones municipales de estos municipios, son inmejorables. Según el alcalde de Tíjola, José Francisco Carreño, "gracias a las excelentes relaciones entre el alcalde de Terrasa, don Pere Navarro i Morera, ha sido posible que este encuentro siga siendo una realidad año tras año. Quiero destacar que este año Pere no ha podido asistir, pero en su lugar y representación, lo ha hecho Don José Ballart, jefe de Relaciones con Instituciones". Entre los actos del reencuentro, se realizó una comida en el día de ayer, en la cual se proyectó un vídeo, en el que los distintos alcaldes de la comarca catalana enviaban sus palabras de agradecimientos al pueblo de Tíjola. Fue el momento en el que se contaron experiencias personales como la de María, de 73 años, que recordaba como su padre emigró con 17 años a Barcelona en bicicleta. "Tardó dos meses en llegar. Allí ha trabajado toda la vida en las carreteras y consiguió criar a sus siete hijos. Siempre nos habló de Tíjola, de su pueblo y sobre todo de su gente" contaba emocionada.
Hoy domingo, servirá como despedida y compromiso de continuar manteniendo este vínculo natural entre dos poblaciones tan alejadas geográficamente y tan hermanadas sentimentalmente.
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