Una juez de Almería ha condenado al portero de un pub de Aguadulce que propinó un puñetazo a un guardia civil que se encontraba fuera de servicio, resistiéndose cuando el agredido y otro agente que lo acompañaba se identificaron como miembros del instituto armado.

La sentencia declara probado que el acusado realizaba labores de control de aforo y accesos en un pub ubicado en el puerto deportivo de Aguadulce cuando tuvieron lugar los hechos, sobre las seis de la tarde del 12 de junio de 2020.

En estas circunstancias mantuvo una discusión con dos guardias civiles que no se encontraban de servicio. En ese momento desconocía que ambos pertenecían a la Benemérita.

En el transcurso de la riña propinó un puñetazo a uno de los agentes, lo que provocó que éste cayera por las escaleras del local. Acto seguido, los guardias se presentaron como tales y le exigieron que se identificara.

Sin embargo el hombre se negó a ello y les dijo que eran unos "mierdas" que no pintaban "nada", así como que les iba a "partir la cabeza", incitándolos a bajar con él a la "arena" para solucionar las cosas 2como hay que solucionarlas".

Por estos hechos el acusado ha sido condenado por un delito leve de lesiones al pago de una multa de un mes, a razón de seis euros al día, por el que también deberá indemnizar con 210 euros al guardia agredido.

Por otro lado, se le impone otra multa de seis meses, con cuota diaria de seis euros, por un delito de resistencia a agentes de la autoridad.