"En relación al uso de las fuentes públicas, esta prohibido bañarse, arrojar cualquier objeto o producto en ellas y tender la ropa en las fuentes o sus inmediaciones. Así mismo se establece un límite máximo para recoger agua de las fuentes, de 30 litros por persona". Estas prohibiciones se recogen en la ordenanza de Convivencia Ciudadana aprobada por el Ayuntamiento. Pero al parecer una de ellas, la de recoger agua, lleva tiempo incumpliéndose. El Ayuntamiento instaló hace unos días un cartel que indica que está prohibido llevarse agua tanto en español. Además, la Policía Local de Berja ha emprendido hace unas semanas una campaña informativa y de vigilancia en las fuentes de la localidad, principalmente en las del Almez y a la del Oro, según recoge el portal de noticias Berjadigital.

Hasta el momento se han dictado algunas sanciones a personas que hicieron caso omiso a las indicaciones de los agentes de la policía municipal y que además suelen tener el vehículo estacionado en una zona en la que está prohibido. Las sanciones podrían ser consideradas como infracciones leves, lo que conllevaría multas de hasta 750 euros que se graduaría en base a la intencionalidad, los daños producidos, la reincidencia y las circunstancias personales del infractor.

El endurecimiento de este control obedece a una demanda de los vecinos que en los últimos meses calificaban la situación de "insoportable" ya que según estos, muchas de las personas que van a llevarse el agua "no respetan nada y lo dejan todo hecho una porquería".