Denuncian el lanzamiento de piedras a los coches a la altura de Pescadería

Todavía no se han recuperado de un susto que pudo acabar con un trágico desenlace. Una familia de la capital sufrió sobre las siete de la tarde del pasado domingo una 'gamberrada' que estuvo a punto de enviar al hospital a dos niñas que viajaban en la parte trasera del vehículo. Según ha relatado a Diario de Almería el afectado, que ha preferido permanecer en el anonimato, nada más pasar por la rotonda del barrio de Pescadería recibieron el impacto de una roca de considerables dimensiones en la ventana lateral. La colisión de la piedra, que provocó la rotura de los cristales que cayeron sobre las dos menores de edad que iban en la parte trasera, se frenó en la silla de protección de las niñas y un milagro impidió que fueron golpeadas directamente. Nada más sufrir el incidente a la altura de las naves del último tramo de la Vía Parque, el afectado fue de manera inmediata a la Comisaría de Policía Nacional para detallar todo lo sucedido e interponer una denuncia contra alguien al que no pudieron identificar. Los agentes han iniciado la investigación de unos episodios que ya se habían producido con anterioridad en el barrio de Pescadería. Según el afectado, se trata de niños que se entretienen lanzando piedras a los coches sin tener en cuenta las trágicas consecuencias que pueden tener sus 'gamberradas' y que se esconden nada más lanzar las rocas en las calles que hay junto a las naves industriales.

Según ha podido conocer este diario, en mayo de 2007 la Policía Nacional de Almería detuvo a un hombre de 67 años, identificado como Teib L., por el lanzamiento de piedras de grandes dimensiones contra los vehículos en circulación en los momentos de más atascos del tráfico. Además de los numerosos daños materiales que se ocasionaron a los turismos en la avenida del Mar, sus acciones fueron consideradas como un delito contra la seguridad del tráfico porque podían haber provocado un grave accidente. En la carretera de Aguadulce, a pocos kilómetros de Pescadería, también fue detenida en la década de los noventa otra persona que lanzaba piedras contra los turismos desde la parte alta de la montaña.